El rector que salga elegido de las urnas el próximo 21 de abril hará el número 27 en la historia de la Universidad de Oviedo. Tomará el mando de una institución que supera los cuatrocientos años y que ha visto pasar a alumnos notables como Leopoldo Alas Clarín, Armando Palacio Valdés, Melquíades Álvarez, Ramón Pérez de Ayala, Gustavo Suárez Pertierra, Víctor García de la Concha, Carlos Bousoño, José Manuel Campa, Sabino Fernández Campo, José Manuel Otero Novas o Celso Arango. Pero si algo ha distinguido a la institución docente asturiana a lo largo de los años ha sido el prestigio nacional y la relevancia de sus investigadores. En parte será también ahora el capital humano quien marque el rumbo para la nueva etapa en la Universidad de Oviedo.

Un censo de 25.000 universitarios entre alumnos, profesores y Personal de Administración y Servicios decidirá en poco más de un mes a quien entregará el bastón de mando Vicente Gotor. Pero, ¿cuáles son los retos a los que se enfrenta una institución lastrada por los recortes de los últimos años -el nuevo rector gestionará un presupuesto con 30 millones de euros menos que cuando llegó Gotor-, las dificultades derivadas de la implantación de Bolonia y las exigencias de un mercado laboral que ya no pide solo titulados, sino profesionales integrales con capacidades para enfrentarse a un mundo cambiante?

Diez son los retos que podrían plantearse los cuatro rectorables tras un inicio de campaña diferido que si bien arranca el 4 de abril hay quien ya inició los primeros contactos hace más de un año. "Están haciendo campaña desde hace tiempo y lo peor, prometiendo cosas que no pueden cumplir", advertía esta semana Gotor. José Muñiz, Pedro Sánchez Lazo, Santiago García Granda y Agustín Costa deberán dar respuesta a algunas de estas cuestiones:

Alumnos. La Universidad de Oviedo contabilizaba al inicio del curso 2014-15 una pérdida de algo más de un 33 % de estudiantes en la última década, siendo según el Ministerio la Universidad que más alumnos perdió en ese tiempo. Un dato negativo que ha mejorado, no obstante, comparándolo con los porcentajes de años anteriores. Asturias tiene hoy unos 21.500 universitarios.

Bolonia. La adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) se realizó en tiempo récord y "a coste cero", repiten en círculos académicos. Ello repercute en una mayor carga burocrática para el profesorado y, para el alumno, una evaluación más fragmentada. Las tasas de rendimiento, no obstante, han mejorado. Se piden ajustes al sistema.

Campaña. Desde esta semana, cuando se hizo oficial el calendario electoral, se repiten las reuniones entre los rectorables y diferentes colectivos universitarios. La de este año será la campaña más larga, al considerarse inhábiles los sábados. El período marcado para la defensa pública de cada una de las candidaturas comienza el 4 de abril y finaliza el día 19 del mismo mes. Las votaciones en primera vuelta serán el 21 de abril, pero una gran mayoría de la comunidad universitaria coincide en que será necesaria una segunda vuelta.

Campus. La demanda histórica de una residencia universitaria en Gijón marcará las promesas de los candidatos en este distrito universitario. Mieres basa sus demandas en los posgrados, el transporte, la estabilidad del profesorado y el fomento de la investigación. En la actualidad, el campus de Mieres sólo cuenta con el máster universitario de Teledetección y Sistemas de Información Geográfica, una oferta que se ampliará con el de Caminos en cuanto la Agencia Nacional para la Evaluación y la Acreditación le dé el visto bueno. Más complicado resulta el mapa en Oviedo, donde la Universidad ve con buenos ojos aprovechar los terrenos del viejo HUCA para mejorar sus costes de funcionamiento y gestión de los edificios.

Financiación. La falta de financiación acarrea consecuencias que influyen en el rendimiento académico de los estudiantes. No obsesiona el hecho de no figurar entre los 500 primeros del ranking de Shangai, donde sí aparecen 13 universidades. La negociación del contrato-programa con el Principado se ha visto frenada por la prórroga presupuestaria. Esta semana el Principado autorizaba a la Universidad a concertar un crédito a corto plazo con vencimiento el 30 de diciembre por un máximo de ocho millones de euros.

Investigación. La mejora salarial de los jóvenes universitarios con becas FPU (Formación del Profesorado Universitario) es una de las prioridades en el seno de la institución académica. Las arcas de la Universidad impiden adelantar el dinero que el Ministerio adeuda a esas jóvenes investigadores.

Motivación. Los cuatro aspirantes coinciden en la necesidad de una Universidad con más empuje y dinamismo. Hay acuerdo para recuperar la ilusión de tiempos pasados, pero sus modelos para hacerlo son distintos. Se presentan como imprescindibles una revisión del sistema de financiación y el abordaje de la toma de decisiones junto con el alumno.

Movilidad. La ausencia de oportunidades para unos y, al mismo tiempo, la posibilidad de tejer una red de contactos en todo el mundo lleva cada vez más a demandar ayudas a la movilidad. Las incluidas en el programa de "Campus de Excelencia Internacional", financiadas por Banco Santander, recibieron 14 solicitudes en su primera edición y ahora ya van por 96. Desde el equipo de gobierno de la Universidad se pelea para "que queden los mínimos investigadores" fuera de esas becas. El nuevo rector deberá impulsar las acciones de movilidad en los campus.

Rankings. Harvard, Stanford, el MIT, Berkeley y Cambridge encabezan la clasificación mundial de Shangai. Por todos estos centros han pasado investigadores de la Universidad de Oviedo. Se pide más internacionalización.

Profesorado. Uno de los primeros desafíos tiene que ver con la precariedad en que se están quedando muchos centros y departamentos por la aplicación de una nefasta tasa de reposición fruto de la ley de estabilidad presupuestaria impuesta por el Estado. La Universidad acumula cuatro años de retraso en la estabilización de profesorado docente e investigador. Se mantuvo al 50% hasta 2015 y en la oferta de empleo para este año las 31 plazas de titular y otras tantas de promoción a catedrático solo alcanzan a la quinta parte de los 300 profesores que cumplen los requisitos para tales puestos. El colectivo jugará un papel relevante en la campaña.