La crisis económica ha propiciado "unos niveles de desigualdad desconocidos en las últimas décadas". Por eso el Consejo de la Mujer de Gijón dio ayer la voz de alarma en la celebración del Día Internacional de la Mujer para exigir "una nueva forma de articular los pactos y las formas de gobernar" de manera que se siga avanzando en la consecución de la igualdad entre sexos.

Las mujeres fueron recibidas en una recepción por la alcaldesa, Carmen Moriyón, quien advirtió del "demoledor" retroceso de la situación de las mujeres en España, con "la reducción de los presupuestos destinados a luchar contra la violencia de género o el recorte en las plazas de guarderías que sólo cubren a tres de cada diez menores".

Moriyón se comprometió a hacer suyas las reivindicaciones feministas del Consejo, que pasan por ocho puntos claves en materias como el empleo y la formación, la educación, la salud, la violencia machista, el bienestar social, las políticas de igualdad, la transversalidad o la participación. Así, el Consejo de la Mujer exigió ayer medidas para acabar con la brecha salarial entre géneros, una mayor participación en la toma de decisiones en los temas de igualdad o un papel activo en la distribución del presupuesto en este área.

Corresponsabilidad

Del mismo modo, reclaman al Ayuntamiento un compromiso anual para desarrollar la cobertura de plazas en las escuelas de 0 a 3 años para cubrir completamente la demanda, dado que se trata de "un instrumento fundamental en la conciliación de expectativas y posibilidades laborales". Y también exigen que se derogue la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la administración local para poder poner en marcha "políticas de igualdad que repercutan en la corresponsabilidad entre hombres y mujeres en el cuidado de la familia".