Zapatos rojos, de todos los tamaños y formatos para denunciar una sangría: la de las mujeres que en un lento goteo perecen a manos de sus parejas o antiguas parejas. Una lacra con la que todos los colectivos convienen en tratar de eliminar y a la que ayer se puso imagen por los pies, con el calzado que representa a las que ya no están.
La acción tuvo lugar en la Plaza del Humedal, en la que se colocaron los pares por convocatoria de Amnistía Internacional, que quiso llamar de esta manera la atención sobre los asesinatos machistas. La "performance" nació en realidad en Ciudad Juárez (México), en agosto de 2009, de la mano del artista Elina Chauvet, con la pretensión de ser "un encuentro del arte y la memoria colectiva". Pero ha evolucionado y viajado a lo largo de años y ciudades y ha acabado convirtiéndose en una acción internacional de denuncia contra las violencias machistas.
Contra el machismo
La "performance" fue el acto previo de la tradicional manifestación con motivo del Día Internacional de la Mujer, convocada por la Plataforma Feminista d'Asturies bajo el lema "Xuntes contra'l Patriarcau y el Capital". La comitiva partió de la Plaza del Humedal y recorrió las calles del centro para denunciar que "el machismo mata", y que "hay muchas vidas en juego". Por eso, el grito fue unánime: "no a la violencia machista".
