Los padres de alumnos del CRA (colegio rural agrupado) de La Coroña-Ceceda, en el concejo de Nava, están "hechos polvo" tras la detención el pasado jueves de un profesor investigado por realizar comentarios improcedentes -de "clarísima" índole sexual- a un niño de diez años del centro, y están a la espera de "lo que decidan los jueces" sobre este asunto. Los padres de los menores -todos muy pequeños- se mostraron ayer extremadamente nerviosos y "angustiados" -en palabras del propio director del centro- por el alcance de este asunto. Aunque todos han sido informados por el centro, alguno de ellos lo considera insuficiente. A la hora de la salida de los críos, todos cerraron filas e hicieron piña en defensa del centro y se negaron a hablar de los presuntos abusos.

En Ceceda, cuando se pregunta por este asunto, todo son caras largas y miradas clavadas en el suelo. Algunos padres se sintieron molestos con el hecho de que la detención haya trascendido. "Este es un sitio pequeño y tenemos miedo del efecto que pueda tener en unos críos tan pequeños", indicó una madre. Las puertas del colegio permanecían cerradas a cal y canto, un hecho inusual, puesto que siempre están abiertas cuando los alumnos se encuentran dando clases, según confirmó el director del centro.

El Tribunal Superior de Justicia de Asturias informó ayer de que la investigación de la Guardia Civil, abierta a raíz de la denuncia presentada por la madre del niño, se centra única y exclusivamente en "unas conversaciones a través de Whatsapp inapropiadas para los interlocutores, un niño de corta edad y su profesor, no habiendo constancia hasta el momento de ningún otro tipo legal relacionado con contactos físicos entre ambos o similares". No constan por tanto nuevas denuncias por parte de otros padres contra el profesor, cuya identidad se corresponde con las iniciales P. L. P., de poco más de treinta años.

La titular del Juzgado de Infiesto, que instruye las diligencias, ha prohibido al profesor acercarse a menos de cien metros de la víctima. Tampoco puede comunicarse por medio alguno con el menor. La juez no ha prohibido al profesor dedicarse a la docencia, como trascendió en días pasados, ya que "no se considera que sea actualmente el momento procesal para tomar una medida de dichas características". Tampoco se ha decretado el secreto de las diligencias, como sostenía el domingo el padre del profesor, residente en un pequeño núcleo naveto, en el que el docente se ha atrincherado tras prestar declaración ante la juez y quedar en libertad con cargos. El profesor se negó a hablar inicialmente con los agentes de la Guardia Civil que le detuvieron, según el Tribunal Superior de Justicia, pero sí respondió ante la magistrada, sin que haya trascendido si reconoció los hechos o matizó algún extremo de la denuncia.

En la jornada de ayer, el director del centro compareció ante el inspector de Educación con el fin de aportar toda la información que le consta sobre este asunto. Estaba previsto que de esta información reservada se derive la apertura de un expediente sancionador al profesor, lo que traerá como consecuencia su inmediata suspensión cautelar, "en beneficio y defensa del alumno presuntamente acosado", según indicó ayer por la mañana el consejero de Educación, Genaro Alonso.

Sustitución del profesor

El consejero indicó que "no hubo tiempo siquiera para tomar la decisión de sustituir al profesor, pero lo natural es que esta misma semana sea sustituido si se confirma el apartamiento cautelar, que es lo que entiendo que va a proceder". Alonso reconoció que, antes de la comparecencia de esta mañana del director -que llegó al colegio justo para la salida de los niños-, no le constaba a la consejería denuncia alguna de este asunto.

El expediente al profesor será "un procedimiento largo". Una vez acordada la suspensión cautelar, "con toda la tranquilidad y los tiempos que el procedimiento establece", se realizarán "las alegaciones pertinentes, siempre sabiendo que prevalece en todo caso la orden judicial establecida al efecto".