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El alquiler de coches particulares llega a Asturias, pero con poco éxito

Las compañías que arriendan vehículos dudan de que esta oferta arraigue y advierten de sus riesgos jurídicos

"Alquilo todoterreno en buen estado. Año 2001 pero tiene menos de 100.000 kilómetros, funciona perfectamente. Es ideal para los caminos y carreteras de Asturias. 40 euros al día". Este anuncio de un particular de Oviedo es uno de los cinco de Asturias colgados en una página de alquiler de vehículos entre particulares, una iniciativa con muy escasa demanda en la región pero que, en cambio, tiene una aceptación creciente en grandes ciudades y en zonas turísticas de España.

A las compañías de alquiler de coches sin conductor les ha salido una nueva competencia, que tiene en internet su principal aliado: el alquiler de coches por parte de los particulares a través de intermediarios como Drivy o Amovens.

Los propietarios cuelgan la foto y las características de su automóvil y ponen precio por el alquiler diario del vehículo. En la página de Drivy, que inició su actividad en España durante el pasado verano y que ya tiene 35.000 coches en oferta en todo el país, cinco particulares de Oviedo y Gijón tienen anunciados sus automóviles por precios que oscilan entre los 60 y los 15 euros diarios.

Uno de los mayores dudas que genera este tipo de servicio es el seguro de los automóviles y quién se hace cargo en el caso de que se produzca un siniestro pero Drivy por ejemplo ha firmado un contrato con una aseguradora multinacional y ofrece incluso asistencia en carretera. Todo dentro del precio del alquiler diario. El particular se lleva un 70 por ciento, la compañía de seguros un 15 por ciento y la intermediaria, Drivy, el 15 por ciento restante.

La cifra en Asturias por ahora no es significativa y, por lo tanto, no supone motivo de inquietud para los profesionales del sector. "El alquiler de coche sin conductor requiere dar de alta a Hacienda para el impuesto de actividades económicas, el IAE, pero no exige tener la tarjeta de transporte. Este requisito afecta, en cambio, a los particulares que se ofrecen vehículo y conductor, como Uber", afirmó Jesús Lucio García, de la compañía Astur Car, que lleva años peleando contra el intrusismo y la competencia desleal en el sector del transporte de pasajeros". García duda de que el alquiler de coches entre particulares arraigue pero, en cambio, sostiene que "los taxistas piratas, sin ningún tipo de licencia, van en aumento porque no hay la vigilancia ni la inspección suficiente".

José Artemio Ardura, secretario general de la Federación Sindical del Taxi de Asturias, cree que el alquiler de coches entre particulares se encuadra entre las actividades que "nacen y mueren rápido por los precios de las empresas del sector, que ofrecen mas garantías al cliente". Ardura, advierte que bajo el sello de la llamada "economía colaborativa se camufla mucha economía sumergida, sin licencias, sin garantías, sin permisos. Es lo que ha pasado con Uber que, por ahora en Asturias no afecta excesivamente".

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