M. G. SALAS

En Asturias sólo se separa a día de hoy el 23% de los desperdicios que se generan en los hogares. El Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos (Cogersa) avisa que la región está "muy lejos" de cumplir el objetivo europeo de 2020 de separar el 50% de los deshechos. Uno de los grandes retos del Principado es reducir el número de rechazos. Es decir, los residuos que se clasifican en un contenedor que no es el adecuado. En el cubo amarillo (plástico), el rechazo medio se sitúa entre el 20 y el 23%, mientras que en el azul (cartón y papel), entre el 1,5 y el 2%. A continuación se resuelven algunas dudas sobre reciclaje.

¿A qué contenedor va el papel de aluminio?

La respuesta correcta es en el amarillo, al igual que el envoltorio transparente (film), el porexpan (corcho blanco) y las tapas de los yogures. Si no separamos correctamente el papel de aluminio, lo más seguro es que acabe en el vertedero cuando la industria del tabaco utiliza unas 29.000 toneladas anuales de este material.

Los tetrabriks, ¿en el cubo amarillo o en el azul?

Aunque pueda haber dudas, es en el amarillo. El esqueleto de este envase está hecho de tres tipos de material: 75% de papel, 20% de polietileno y 5% de aluminio. Cada uno tiene su propia función: el papel le da robustez; la hoja de aluminio actúa de barrera contra la luz, el aire y los olores; y el polietileno le otorga la estanqueidad necesaria para envasar líquidos. Del reciclaje de los briks se obtiene papel y madera plástica, un material utilizado en la fabricación de muebles y también en la construcción.

¿Dónde depositar los medicamentos?

Los fármacos se encuadran dentro de los denominados "contaminantes orgánicos emergentes", los cuales podrían ocasionar riesgos medioambientales y sanitarios si se mezclan con la basura doméstica o se tiran por el desagüe. Por ello, y siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias, los restos de medicamentos deben depositarse en los puntos SIGRE (460 farmacias) para ser eliminados correctamente.

¿Qué hacer cuando queremos deshacernos de una sartén o una olla?

Nada de tirarla a la basura. Hay que pensar que ambos utensilios contienen una gran cantidad de metal -y además de calidad- que se desperdicia si lo tiramos al contenedor. Lo ideal es llevarlo a un punto limpio para que pueda ser reciclado con la chatarra. Lo mismo hay que hacer con CDs y DVDs, barnices, baterías, aceites (ya sea para cocinar o para coches) y electrodomésticos.

Los insecticidas, ¿se reciclan?

Si el envase contiene el símbolo de punto verde (flecha curva) se tira al contenedor amarillo para su reciclaje. En el caso de no encontrar este icono en su etiqueta, hay que llevarlo a un punto limpio. Hay que tener en cuenta que los insecticidas son productos peligrosos y muy tóxicos. Más de lo que pensamos.

¿Cómo separar los juguetes paso a paso?

Solo un 2% de los juegos electrónicos acaba en plantas de reciclaje. Las baterías, por ejemplo, pueden contener cadmio, mercurio o plomo, componentes peligrosos que en el caso de no tratarlos correctamente podrían contaminar el entorno. Por ello, cuando se quiere tirar un juguete, se recomienda en primer lugar separar sus embalajes de plástico y de cartón para depositarlos en los contenedores amarillo y azul, respectivamente. En segundo lugar, retirar sus pilas o baterías usadas para eliminarlas en los contenedores específicos. Y por último, llevar su estructura exterior a un punto limpio.

¿Qué hacer con el vidrio plano, los espejos y el cristal?

Al no ser envases, no se pueden depositar en el cubo verde de vidrio. Lo correcto es tirarlo al contenedor de residuos domésticos. Algunas aplicaciones del reciclaje de vidrio son, en la construcción, la fabricación de fibra de vidrio, asfalto para carreteras o azulejos.