El Museo de Geología de la Universidad de Oviedo, cuyo proceso de ampliación ha comenzado hoy, triplicará su espacio expositivo con unas nuevas instalaciones que contarán con acceso directo a la calle en su apuesta por compatibilizar docencia y divulgación.

El rector de la institución académica asturiana, Vicente Gotor, ha expresado su satisfacción por poder presentar la puesta en marca de la ampliación del Museo de Geología, que ha considerado uno de los proyectos que tenía que llevar a cabo en su mandato, que finaliza este mes.

Ubicado en la Facultad de Geología, el Museo contará con un nuevo diseño de fachada y dispondrá de acceso directo desde la calle, lo que en opinión de su conservador, Luis Miguel Rodríguez Terente, facilitará una apertura a la sociedad del equipamiento, que posee 32.000 piezas inventariadas recogidas durante los últimos 50 años.

El Museo de Geología, creado en 2001, pasará de los 122 metros cuadrados actuales a casi 300, y dispondrá de espacio para duplicar el número de piezas exhibidas, de las 700 que se muestran actualmente a más de un millar.

El proyecto de reforma cuenta con un presupuesto de licitación de 190.000 euros, en un plazo de ejecución de cuatro meses, en los que será retocada una de sus fachadas del edificio que alberga el Museo, con un previsión de duplicar el número de visitantes anuales, situado en la actualidad en 4.000 personas.

Asimismo, la reforma será aprovechada, además de ganar metros, para dotar de un hilo conductor a todo el espacio para que el visitante pueda conocer diversas disciplinas geológicas según el recorrido que realice.

El Museo alberga piezas de primer nivel, entre las que destacan en su colección de meteoritos el que impactó en Cangas de Onís el 6 de diciembre de 1866 y el de Cheliábinsk, que golpeó Siberia el 15 de febrero de 2013, del que la Universidad de Oviedo conserva el primer fragmento que llegó a España.