La campaña de control de alcohol y drogas iniciada por la Guardia Civil de Tráfico el lunes de la semana pasada, concluyó ayer domingo. Durante toda la semana, se han hecho test de alcoholemia y de drogas en las diferentes carreteras de la región, a cualquier hora del día. En Asturias, dieron positivo el año pasado un total de 3.064 conductores, solo en las carreteras interurbanas, que dependen de la Guardia Civil. Estaba previsto que, a nivel nacional, se practicasen unas 25.000 pruebas de alcoholemia y drogas al día.
Según la memoria anual del Instituto Nacional de Toxicología, el 39,09 por ciento (240) de los 614 conductores fallecidos y analizados por dicho organismo tenían presencia en sangre de alcohol, drogas o psicofármacos. En el caso de los peatones analizados (173), este porcentaje asciende al 40 por ciento (69). En 2015, más de 105.000 conductores en el conjunto del país dieron positivo en controles de alcohol y drogas.
Doce de cada cien
El último estudio de prevalencia de consumo de sustancias psicoactivas elaborado por la DGT durante el año 2013 concluye que conducir después de haber consumido sustancias psicoactivas es un hecho frecuente en España, alcanzando a doce de cada cien conductores.
La campaña de vigilancia finalizada ayer, y de la que hoy se comenzará a dar datos, hizo especial hincapié en el colectivo de policonsumidores, aquellos conductores que habitualmente circulan tras haber consumido alcohol y drogas.
