Aún hay esperanza para la iglesia de San Antolín de Bedón. Rescatarla del olvido y el abandono en el que está sumida no solo es posible sino que está más cerca que nunca, porque el problema jurídico que la mantiene en un limbo administrativo (el Estado rechaza asumir la titularidad, pese a que toda la documentación existente demuestra que es su propietario desde hace casi 200 años) está perfectamente diagnosticado, e incluso se ha señalado el camino a seguir para que haya una rectificación. Es el mensaje, lanzado desde la preocupación, pero cargado de optimismo que ayer emitieron los ponentes del Conceyu Abiertu organizado por el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA y celebrado en la Casa de Cultura de Llanes, sobre el presente y el futuro de la iglesia de San Antolín de Bedón, en el que el público asistente participó activamente.

En un acto moderado por la directora del Club Prensa Asturiana, María José Iglesias, la concejala de Cultura de Llanes, Marisa Elviro; el subdirector del Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA), Andrés Martínez; y el profesor universitario y editor de la revista "Bedoniana", Juan Carlos Villaverde, coincidieron en subrayar su firme empeño en buscar una salida para la iglesia de Bedón. El Ayuntamiento hará "todo lo que esté en su mano" para sacar a San Antolín del abandono", señaló la edil, que indicó que la de Bedón es "la historia de un despropósito", pues lleva "años y años en tierra de nadie", sufriendo un "cúmulo de inacciones, acciones erróneas, equívocos y desintereses". Elviro resaltó algunos de los datos publicados en la revista "Bedoniana": el Estado desamortizó toda la finca de San Antolín de Bedón, incluida la iglesia, "luego era suya". Y lo sigue siendo, explicó la concejala "porque quedó exceptuada de la venta".

Marisa Elviro destacó los "avatares surrealistas" que llevaron al Estado a no reconocer en 2014 la titularidad del templo, "sin tener en cuenta toda la documentación existente" y simplemente "por la doctrina de actos propios, que dice que no debe decir que algo es suyo si antes dijo que no lo era. Aunque lo sea".

La responsable de Cultura destacó que la iglesia de Bedón, pese a ser un bien de interés cultural (BIC) y a no estar registrada a nombre de nadie, está ahora mismo cerrada al público, que ni siquiera puede acceder al exterior del edificio, "porque uno de los propietarios de la finca en la que se enclava cambio las cerraduras, no entregó la llave a ningún organismo público y cerró la entrada a la finca. Todo ello sin que la Administración haya intervenido". Pese a todos los obstáculos, prometió "seguir aburriendo a quien haga falta para sacar a San Antolín de Bedón del abandono".

Andrés Martínez destacó su "implicación" con el patrimonio asturiano y, "en especial", con San Antolín de Bedón, que en su opinión "no es una iglesia románica cualquiera. Es única", añadió. El subdirector del RIDEA, tras incidir en que de la iglesia de Bedón se sabe "casi todo", resaltó que el deterioro va en aumento de año en año de manera "evidente". Relató que hace unos años visitó la iglesia y vio cómo sus piernas acababan enterradas hasta las rodillas. "La iglesia estaba nadando en agua. Esto es inadmisible", añadió. Martínez subrayó que el de San Antolín de Bedón "no es un problema económico, sino administrativo. Eso sí que nos debe sonrojar. Eso sí que nos indigna", añadió.

Martínez se preguntó a qué responde la "situación anómala" de la que considera una "joya del románico. ¿Incapacidad? ¿Pasividad? ¿Menosprecio? ¿Ignorancia? ¿Desconocimiento?", se preguntó, para a continuación explicar lo que, en su opinión, debe hacerse: "la experiencia dice que en este país sólo te escuchan cuando das patadas en las puertas, cuando acudes a los medios de comunicación o cuando hay actos como este Conceyu Abiertu. Debemos ser insistentes, e ir un paso más allá de la loable iniciativa popular. Hay que aunar esfuerzos, dirigirse a los alcaldes y explicarles que San Antolín no es un asunto solo de Llanes, sino comarcal, de toda Asturias", dijo. También abogó por pedir ayuda a las asociaciones del Camino de Santiago, que discurre junto a la iglesia llanisca, "elaborar manifiestos, propiciar reuniones, convocar ruedas de prensa, emitir opiniones..."

Juan Carlos Villaverde inició su intervención destacando que el deterioro de Bedón llegó "cuando cerró la casería, cuando dejó de haber presencia humana al jubilarse los caseros de San Antolín". Lanzó, no obstante, un mensaje "de esperanza y optimismo", porque "por primera vez San Antolín está "muy bien conocido y documentado. Y esa nebulosa jurídica sobre la propiedad de la iglesia ya está perfectamente delimitada", indicó. El profesor de la universidad de Oviedo se refirió en varias ocasiones a un informe elaborado por su hermano José Luis, cuyo resumen publicó LA NUEVA ESPAÑA el pasado sábado, en el que se indica por qué el Estado rechazó asumir la titularidad del bien (una decisión política de los dirigentes del ministerio de Hacienda) y cómo afrontar esa situación (reabriendo el expediente sobre la propiedad de la iglesia).

"Sabemos que el problema está en el Estado. Debemos salir de la dinámica de quejas y lamentos y apuntar hacia ahí", señaló Villaverde. En su opinión, es preferible que esa acción, aún con apoyos del Ayuntamiento y el Principado, sea impulsada "por la sociedad civil", "por la iniciativa ciudadana", a través de la plataforma en defensa de San Antolín de Bedón, creada hace unos años por un grupo de vecinos y veraneantes de la localidad de Naves de Llanes. El objetivo ha de ser corregir la "aberración jurídica" que llevó al Estado a no asumir la titularidad de la iglesia, para no contradecir una decisión anterior, sin tener en cuenta la nueva documentación existente.

El Estado, resaltó Villaverde, no tuvo en cuenta un documento publicado en 1823 en "Crédito Público" y reeditado en "Bedoniana", en el que se anunciaba la salida a subasta pública de la finca de Bedón, iglesia incluida, lo que demuestra que era su propietario. Indicó que ahora se impone "ser inteligentes y apuntar al Estado", para que rectifique.

El público intervino tanto para hacer preguntas a los ponentes como para emitir opiniones. Uno de los presentes preguntó si el hecho de que Bedón sea "parte del Camino de Santiago" podría servir para movilizar a alguna asociación. Andrés Martínez apostó por acudir al comité internacional de este itinerario, dependiente de la Xunta de Galicia, enviarle un dossier y pedir apoyo, porque tiene "muchísima fuerza".

Otra asistente preguntó cuándo San Antolín será reconocida como bien público, cuestión que nadie se atrevió a calcular, aunque todos expresaron su deseo y su confianza en que sea cuanto antes. Otra llanisca destacó que el Estado financió "siete intervenciones de Luis Menéndez Pidal" en el monumento, y también la ejecutada en 1998, lo que a su juicio demuestra que "reconocía que era suyo". El futuro uso de la finca, como albergue de peregrinos o centro turístico, e incluso su posible expropiación fueron también objeto de debate.