A los mayores asturianos les preocupa, y mucho, la actual situación política, que puede abocar en unas terceras elecciones si los grupos no se ponen de acuerdo, amén de la profunda crisis interna del PSOE.

"Los políticos miran para los sillones, para ellos, y no para el bienestar de la gente", sentenció la maliayesa Loli Fernández ayer, en Villaviciosa, donde se celebró el Día Internacional de las Personas Mayores. Reconoce que lo más le inquieta, además de que no haya gobierno, es la pensión. Es lo que más intranquiliza también a Begoña González, presidenta del Hogar del Jubilado de Villaviciosa. "Lo primero, que no haya gobierno porque si no tenemos gobierno, no tenemos nada. También me preocupan las pensiones, por supuesto", indica.

No distan mucho de los pensamiento de Álvaro Caravia, que ayer también asistió a los actos del teatro Riera, que finalizaron con una comida en el Hogar del Jubilado. "Estamos peor que antes", lamenta. En su mente está poder cobrar la jubilación y tener un gobierno que se la garantice, aunque también le abruma "por el futuro de la gente joven". Unas butacas más adelante se sentaba Prudencio de La Ballina, de Grases (Villaviciosa). "Me preocupa la situación política y las pensiones, porque son bajas, pero lo que más es la gobernabilidad del país", argumentó. Igual de claro lo tiene Alicia Fresno: "Las pensiones es lo primero, pero también que no haya gobierno".

El vicepresidente de la Federación de Asociaciones de Mayores del Principado de Asturias (FAMPA), Miguel Ángel de Dios, expresó las inquietudes de este colectivo, que representan alrededor del 26% de la población, apuntó la directora general de Servicios Sociales de Proximidad, Lina Menéndez.

Miguel Ángel de Dios no se anduvo con rodeos: "Estamos lejos de gozar de la tranquilidad deseada en la jubilación". Por lo que, aprovechando la presencia de la consejera de Servicios y Derechos Sociales, Pilar Varela, pidió "a las autoridades el cumplimiento de las obligaciones con los derechos consolidados de las personas mayores". Denunció el "saqueo de la hucha de las pensiones" y criticó la gran brecha que ha dejado la crisis, con la que "ha desaparecido la clase media", dividiendo la sociedad entre una clase media baja, de la que forman parte el 80% de los españoles, y una clase "escandalosamente rica", en la que se incluye el 20% de la población.

Entre los deberes que los mayores, en palabras de Miguel Ángel de Dios, les pusieron a los dirigentes destaca "retomar la ley de dependencia, para que nadie se quede fuera" y crear un sistema "seguro y universal", además de actualizar las pensiones con el Índice de Precios al Consumo (IPC), como se aprobó en el Pacto de Toledo. El vicepresidente del FAMPA agregó la necesidad de potenciar el asociacionismo de los mayores y promocionar locales de encuentro, además de proteger la sanidad pública. "Lo que avancemos en prestaciones y calidad de vida repercutirá en las personas mayores del futuro. También se hizo eco de la preocupación generalizada: "Esperamos y deseamos que surja un gobierno que devuelva el estado de bienestar". Porque confían en poder llegar a conmemorar algún uno de octubre "como es debido". Es decir, "con alegría y sosiego y celebrando la recuperación de los derechos injustamente arrebatados", concluyó.

La consejera de Servicios y Derechos Sociales, Pilar Varela, llegó ayer a Villaviciosa con parte de los deberes hechos. Apuntó que una de las prioridades del gobierno regional es "luchar contra la desigualdad", que denunciaron los mayores. Aludió a la Organización Mundial de la Salud, que recomienda garantizar a los ancianos salud, participación y seguridad. "Seguridad es la tranquilidad de que tras trabajar toda una vida no sea un momento de incertidumbre y pérdida de recursos y tener la seguridad de una pensión digna", apuntó Varela. Por lo que propone recuperar el Pacto de Toledo para revitalizarlo, pues lo ve "fundamental para el presente y el futuro". Esa misma seguridad también pasa por la ley de dependencia, pues debe garantizar el "derecho subjetivo de que cuando vamos perdiendo autonomía se nos cuide y atienda cuando no nos valemos por nosotros mismos. Es fundamental para avanzar en la idea de bienestar", destacó. Pide un pacto nacional por la dependencia para crear un sistema nacional. Valera explicó que de los 180 millones de euros de inversión, el gobierno central asume 22,5, alrededor del 15%, mientras que el regional aporta más del 70% y los ciudadanos, el 15% a través del copago. "Esto no está equilibrado", denunció.