Con solemnidad y orgullo honraron ayer los guardias civiles de la compañía de Avilés a la patrona del cuerpo, la Virgen del Pilar. Primero lo hicieron con una emotiva misa, en la iglesia de Santa Bárbara de Llaranes, y después con un entrañable acto en el acuartelamiento de Bustiello, donde se entregaron las condecoraciones a agentes y entidades que, con su labor, "han mejorado la sociedad". Durante su discurso, el capitán, Mariano Revuelta, se felicitó por que los delitos penales hayan descendido en un 15 por ciento con respecto al pasado año. Se refirió a los "recortes que seguimos sufriendo", agradeció la "inestimable colaboración" ciudadana y tuvo palabras muy cariñosas para todos los galardonados. Se detuvo especialmente en alabar el trabajo del comisario del Cuerpo Nacional de Policía en la ciudad, Agapito Pérez (a punto de jubilarse), y de las trabajadoras de la casa de acogida de mujeres maltratadas. "En lo que va de 2016, han sido atendidas 39 mujeres y 19 menores, lo que supone que este tipo de acciones lamentablemente van en aumento y no en disminución, como todos desearíamos", apuntó.

La iglesia de Santa Bárbara se llenó a mediodía para la misa en honor de la patrona de la Guardia Civil, con los agentes ocupando los primeros bancos. La eucaristía estuvo cooficiada por el párroco de Llaranes, José María Murias, y el arcipreste de Avilés, Vicente Pañeda. Durante la liturgia, Murias ensalzó la labor de la Benemérita y "su compromiso con la sociedad, con el orden y la solidaridad". Además, tuvo palabras muy cariñosas para los agentes que navegaban en la embarcación que recientemente rescató a cerca de 1.300 emigrantes en aguas del Mediterráneo. "Son un ejemplo para todos", dijo, poco antes de que sonaran los acordes del himno nacional para poner el colofón a una ceremonia que estuvo amenizada por el coro parroquial.

Tras la misa, las celebraciones continuaron en el acuartelamiento de Bustiello, donde se entregaron los reconocimientos de este año ante un nutrido público, entre autoridades, guardias civiles y familiares. Un momento cargado de emoción. Los tres primeros galardonados fueron agentes del cuerpo: Emilio Jiménez Pérez, que recibió la Cruz de la Orden del Mérito de la Guardia Civil con distintivo blanco; Félix González Saiz, con la Cruz del Mérito Militar; y Pegerto Miño Fernández, que recibió la Cruz de oro de la Cruz de la Constancia. José Antonio García García, "Toti", guarda de campo del coto de Sierra Pulide, también se llevó la condecoración de la Cruz de la Orden de Mérito de la Guardia Civil.

A continuación, el capitán del acuartelamiento tuvo un emotivo recuerdo para los guardia civiles fallecidos, retirados y en reserva. Fue el preludio a la entrega de varias figuras ecuestres, que recalaron en el subteniente retirado Román Amador Cañada; y los guardias en reserva José Antonio Martín Alonso y Carmelo Montero.

Por último, se concedieron los reconocimientos a las personas o entidades relacionadas y colaboradoras con el acuartelamiento de Bustiello. Fueron para Celia Fernández y Yohana Magdalena, responsables de la casa de acogida de mujeres maltratadas, y para el comisario de la Policía Nacional de Avilés, Agapito Pérez, ante su inminente jubilación. "Le echaremos de menos, perdemos a un gran comisario, aunque él ganará tiempo para su familia", destacó Revuelta.

El capitán también mencionó con gran cariño a Palmira García Otero, que fue presidenta de la Asociación de Donantes de Sangre de Avilés y Corvera hasta su fallecimiento hace unos meses. Revuelta destacó que el pasado 13 de agosto, la Guardia Civil de Avilés recibió la distinción al mérito nacional a la donación altruista en España, que concede la Federación Nacional de Donantes, gracias precisamente a la intermediación de García, "mujer que siempre fue muy querida en toda la ciudad por su carisma".

A continuación, tomó la palabra la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín. "La Guardia Civil es un ejemplo para todos por su labor diaria a favor de la seguridad", dijo. "Además, tenemos la suerte no sólo de la buena coordinación que tiene con la Policía Nacional y la Policía Local, sino de la armonía que reina entre los tres cuerpos", remató, ante la atenta mirada del público, entre los que estaban el alcalde de Illas, Alberto Tirador; la presidenta del PP local, Carmen Rodríguez Maniega, y los ediles de esta formación Carlos Rodríguez de la Torre, Constantino Álvarez y Reyes Fernández Hurlé; además del presidente de la Autoridad Portuaria, Santiago Rodríguez Vega, entre otros. El homenaje a los agentes fallecidos puso el punto y final a un día de emoción, patriotismo y reconocimientos.