La incorporación de las nuevas tecnologías para el manejo de las enfermedades es uno de los campos de mayor interés y atractivo en un continente envejecido. La telemedicina, o dicho de otra forma, la evaluación y control de los pacientes crónicos a través de dispositivos como una pulsera o un reloj, será una realidad a medio plazo. Su desarrollo permitirá monitorizar y aplicar medicación de manera personalizada a enfermos crónicos, por ejemplo en el caso del cáncer, o de los diabéticos. Pero también se investiga la aplicación de la tecnología para evitar caídas, mediante dispositivos y sensores vinculados a estímulos.
Leandro Pecchia (Nápoles, 1976) es profesor adjunto de Ingeniería Biomédica de la Universidad inglesa de Warwick y su trabajo como investigador se centra en la búsqueda de soportes, de dispositivos que sirvan para procesar y evaluar las señales biomédicas extendiéndolas al comportamiento. Por ejemplo, el desarrollo de una pulsera, un reloj, un colgante... un dispositivo único y pequeño que incluya varios nanosensores que acumulen todos los datos combinando los clínicos y de comportamiento para obtener la información completa del paciente y tenerlo permanentemente monitorizado sin que tenga que desplazarse a ningún centro médico.
El profesor visita estos días Asturias para reunirse con el partenariado de innovación en envejecimiento activo, en el marco de las jornadas organizadas este mes y el que viene para cooperar con centros de la Asociación Europea para la Innovación sobre el Envejecimiento Activo Saludable. Se trata de conocer qué se está haciendo en otros países, mostrar lo que se investiga en la región, medir y evaluar los avances que se producen y colaborar en la búsqueda de soluciones y de negocio.
Leandro Pecchia explicó que combinar la información clínica con el comportamiento es muy importante no sólo para controlar enfermedades, sino también para detectar otro tipo de padecimientos. Y puso un ejemplo, "Supongamos una persona monitorizada a través de una pulsera que incorpore varios sensores y a la que se detecta una variación en su comportamiento diario. Los datos que se han recogido indican que clínicamente no existe ninguna alteración, luego tienen que existir razones de otro tipo, como puede ser una depresión. Contar con toda esa información permite no sólo detectar el problema, sino personalizar el tratamiento para dar una solución".
El joven profesor e investigador señaló que "esa visión global del paciente que en el siglo XIX y principios del XX era intuitiva se podrá recuperar ahora pero gracias al desarrollo de los medios tecnológicos".
Más, un enfermo de cáncer que se tiene que someter a terapia durante un largo periodo de tiempo. "Se podrá identificar en qué momentos del día el paciente es más sensible a la medicación, más receptivo. Eso permitirá que, si se aplica a esas horas, se pueda reducir la cantidad del tratamiento obteniendo el mismo efecto que si se le pone más a cualquier hora. Esto es muy importante porque este tipo de tratamientos tienen todavía enormes efectos secundarios y muy importantes durante un tiempo prolongado, y todo lo que se pueda avanzar para reducirlos es fundamental para la calidad de vida del paciente".
Pero hay más ejemplos, como el de un paciente que sufre de diabetes. "Saber las horas que duerme es fundamental para ajustar la medicación. Si está monitorizado se sabe perfectamente si el tratamiento es el adecuado o si es necesario variarlo".
Según Pecchia, "cada paciente es diferente y por eso los tratamientos, la medicación, no puede ser la misma para todo el mundo. Y para eso es muy importante manejar los datos combinados clínicos y de comportamiento, porque permite personalizar los tratamientos".
Los avances en la aplicación de estas tecnologías y el desarrollo de los dispositivos permitirán que estén al alcance de los ciudadanos "a medio plazo. Ahora ya se puede obtener parte de la información en el móvil", aseveró el profesor, que hoy se reunirá con estudiantes e investigadores en la Politécnica de Gijón y visitará centros tecnológicos para compartir información.
