El voto en contra del PSOE a las propuestas fiscales que Podemos e IU llevaron el jueves a la Junta ha desconcertado a la coalición y a su portavoz parlamentario, prevenido ya contra un escenario de negociación presupuestaria más cargado, si cabe, de incertidumbres. A Gaspar Llamazares le falta una explicación de los socialistas al rechazo de una iniciativa que él ve similar a otra presentada hace un mes que, entonces sí, recuerda, logró el respaldo del PSOE.

Interpreta el diputado que el "no" socialista "llena de incertidumbre la voluntad política del Gobierno de llevar a cabo la reforma fiscal necesaria para dotar de recursos a los próximos presupuestos" y que "contradice todo su discurso de diálogo y a favor de un presupuesto de cambio para Asturias". Llamazares no encuentra en el texto de su proposición nada que colisione con las intenciones declaradas por el Principado en su pretensión de un consenso presupuestario dentro de la izquierda. Afirma perplejo que la iniciativa planteaba una reforma fiscal que coincidía con lo hablado, con un plan de lucha contra el fraude, la suspensión del "error de salto" en el Impuesto de Sucesiones o la mejora de la progresividad y las nuevas figuras ambientales.