La Audiencia Provincial de Madrid ha ordenado reabrir una querella contra el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, presentada por un grupo de antiguas monjas de Lumen Dei, que le acusan de estafa y coacciones, así como delitos contra la Seguridad Social o la libertad religiosa. El asunto fue archivado por orden del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, pero ahora la Audiencia considera debe investigarse.

La querella iba dirigida tanto contra el arzobispo de Oviedo como el obispo de Cuenca, José María Yanguas, a los que acusan de presunta estafa, apropiación indebida, usurpación de personalidad jurídica y falsedad documental. Lumen Dei considera que esta demanda ha sido presentada por un grupo de exmiembros que están suplantando su nombre.

El motivo del enfrentamiento enraíza en la polémica que rodeó al movimiento Lumen Dei, creado por el jesuita nacido en Pravia Rodrigo Molina. Jesús Sanz Montes fue designado por la Santa Sede en 2009 como Comisario Pontificio para garantizar que exintegrantes de Lumen Dei que habían sido excluidos de la organización devolviesen ciertas propiedades a la única asociación Lumen Dei admitida por la Iglesia.

Según la querella, tanto Sanz Montes como Yanguas redactaron un certificado para convertirse en los representantes legales de Lumen Dei, siguiendo las órdenes de la Santa Sede. La asociación, que hasta entonces estaba formada por tres entidades, pasó a convertirse en una sola, situación jurídica que cuestionan los denunciantes.

Los exmiembros de Lumen Dei consideran que el arzobispo de Oviedo intervino cuentas de los miembros que forman parte de la asociación y administró sus bienes "hasta el punto de dejarles sin electricidad ni agua".

Además, los denunciantes cuestionan cómo se llevó a cabo la venta de patrimonio de la asociación que incluye fincas de la calle Xuclà de Barcelona (cinco plantas de más de 19.000 metros cuadrados en el corazón turístico de la ciudad), el colegio Saint Mary of Fatima en Pozuelo de Alarcón y un edificio en la calle Maria Ripoll de Madrid, todo ellos por varios millones de euros.

Las antiguas monjas de Lumen Dei que viven en los edificios de Barcelona han recibido orden de desahucio.