Santullano, una de las joyas más singulares del Prerrománico asturiano, volvió ayer a brillar y deslumbrar como hace doce siglos, cuando Alfonso II entró por primera vez al templo. Las nuevas destrezas tecnológicas digitales, permiten apreciar en toda su grandeza el trabajo de los profesionales que levantaron la iglesia en las primeras décadas del siglo IX, lograron sorprender y emocionar. Hasta el punto de que concitaron una ovación unánime entre los espectadores que abarrotaron el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA para conocer de primera mano este proyecto de arte imperecedero y de ultimísima tecnología con el que el periódico celebra su 80.º aniversario.
La fiesta de cumpleaños de LA NUEVA ESPAÑA, con la presencia de las principales autoridades y representantes públicos de la región, además de numerosos lectores y una nutrida representación académica de los mejores especialistas en arte prerrománico, fue también la de la doble fascinación ante las maravillas del Santullano primigenio y de la realidad virtual y el modelado digital que permitió ayer a los asistentes viajar al pasado y descubrir las pinturas originales del templo.
El arqueólogo César García de Castro, encargado de pronunciar la conferencia sobre Santullano contemplado a la luz del año 2016, refrendó el trabajo realizado por los infógrafos de LA NUEVA ESPAÑA, Juan Ferreira y Santiago Cuesta, al situar el templo en lo más alto del arte de su época, por "su autenticidad", el carácter "único" de sus pinturas, el tamaño de sus murales y su condición de "exponente máximo" del "refinamiento" que define las producciones culturales del Reino de Asturias.
El público asistente pudo conocer en profundidad el trabajo realizado para modelar digitalmente y recrear en realidad virtual el aspecto original de Santullano. Lo hizo a través de un detallado documental en el que a los testimonios de los profesionales que se enfrentaron a este reto tecnológico se sucedieron las reflexiones de los principales especialistas en la materia. Pero también, y esa fue la parte que despertó más admiración y maravilla, pudieron enfundarse alguna de las gafas de realidad virtual puestas a disposición de todos los espectadores una vez finalizada la presentación.
Único en sus motivos
Con las gafas puestas, los asistentes penetraron virtualmente en el interior del templo para fascinarse, de nuevo, con unas pinturas que en palabras de García de Castro son "el único ejemplo conservado de templo cristiano medieval con un repertorio pictórico carente de motivos figurativos".
Y ese redescubrimiento, como señaló en su discurso el presidente de Prensa Ibérica, Javier Moll de Miguel, es la expresión última de "la historia de amores correspondidos entre el periódico, los asturianos y su tierra que explica el éxito de LA NUEVA ESPAÑA". "Si hay algo verdaderamente universal en Asturias es el Prerrománico", prosiguió. Por eso, "qué mejor forma de explicitar el compromiso con la región y de agradecer a los lectores su confianza que mostrándoles la joya del arte asturiano tal como fue en el siglo IX", concluyó el editor del diario.
Lo hizo antes de señalar que, ante la sobreabundancia de información que recibe el ciudadano en estos tiempos de globalización "un periódico independiente, serio, riguroso, ordenado, cosmopolita, valiente y plural como es LA NUEVA ESPAÑA, sin sectarismos ni exclusiones, resulta más necesario que nunca".
La presentación de la recreación virtual de las pinturas originales de Santullano, que también se transformará en una exposición itinerante a lo largo de 2017, fue el mejor broche para la celebración del 80.º aniversario de LA NUEVA ESPAÑA. La directora del periódico, Ángeles Rivero, confió en que el trabajo presentado ayer pueda ayudar a "valorar este deslumbrante legado como sin duda merece". Esa será, afirmó, "la mejor garantía de preservación".
Pero el cumpleaños también vino acompañado de otro gran regalo, la "excelente noticia" que constituyen los datos de difusión del periódico. Habló de ellos Javier Moll cuando citó que esta es la octava cabecera de información general más leída del país, "codeándose con lo más grandes". Le puso cifras Ángeles Rivero, que abrió el acto celebrando que el diario apague 80 velas con la mayor audiencia de su historia: "301.500 asturianos eligen diariamente nuestro periódico en papel para informarse de lo que ocurre en su tierra y lejos de ella. Además, 230.000 usuarios únicos consultan cada día por término medio nuestro portal digital, lo que se traduce en 27 millones de páginas vistas mensuales".
Pero todos esos lectores y su calidad se transforman también, como señaló el presidente de Prensa Ibérica, "en un elevado nivel de exigencia que nos obliga a la excelencia periodística, a ser cada día mejores".
El acto discurrió en un abarrotado Club Prensa Asturiana en cuyas primeras filas se encontraban Isidoro Nicieza, director general de contenidos de Prensa Ibérica y director general de LA NUEVA ESPAÑA; José Manuel Vaquero, consejero de Prensa Ibérica; Eduardo Suárez, gerente del periódico y Melchor Fernández, que fue director de LA NUEVA ESPAÑA, entre otros responsables del diario.
Prensa Ibérica inició desde el mismo momento en que asumió la titularidad del diario en 1984 un camino de "cambios y mejoras que no cesan". Javier Moll lo ejemplificó con la reciente reforma del Club Prensa Asturiana, donde ayer se celebró el aniversario, pero también adelantó que "estas trasformaciones proseguirán" como consecuencia del "cambio de paradigma en el que se encuentra inmerso el mundo de la comunicación".
En ese camino que obliga a "asumir los retos del futuro con valentía y determinación", el presidente de Prensa Ibérica habló de la "irreversible" transición al paradigma digital que en el caso de LA NUEVA ESPAÑA se aborda, recalcó, "desde la seguridad de la enorme importancia que siguen teniendo los soportes analógicos y la fortaleza que nos da el ser merecedores de la confianza de los asturianos".
Combinación de esa voluntad innovadora y de compromiso con la sociedad en la que vive el periódico ha sido el trabajo sobre Santullano presentado ayer y lo será, también, la publicación especial que LA NUEVA ESPAÑA ofrecerá el lunes a todos sus lectores, día en que se cumplen los ochenta años de la cabecera. Ese especial, explicó Ángeles Rivero, propondrá ochenta ideas para Asturias formuladas por ochenta personalidades de la región. "Si alguna de estas propuestas concita la suma de voluntades necesaria para convertirse en realidad", explicó Rivero, "nos sentiremos enormemente satisfechos y recompensados en el ejercicio de lo que consideramos nuestra obligación: ser útiles a la sociedad a la que servimos, y con la que nos sentimos profundamente comprometidos".
Ángeles Rivero Velasco se despidió con la promesa de que "en tiempos de la postverdad, LA NUEVA ESPAÑA sigue apostando por el verdadero periodismo, libre, independiente y plural".
