El exlíder minero José Ángel Fernández Villa tendrá que declarar ante la magistrada Simonet Quelle Coto el próximo 12 de enero. La titular del Juzgado número 2 de Oviedo ha resuelto que "los padecimientos que sufre el investigado no le impiden en absoluto el declarar en calidad de investigado en fase de instrucción, sin que se produzca con ello vulneración ni de su Derecho de Defensa ni de ningún otro Derecho Fundamental que le asista".

La magistrada sí tiene en cuenta la situación personal del exsindicalista y ha decretado que el interrogatorio debe adaptarse "al lenguaje del investigado", que en ningún caso podrá "ser sometido a presión" y deberán "formularse preguntas simples y de respuesta sencilla, a garantizar tiempo para la respuesta, a velar por la práctica de las interrupciones pertinentes que permitan el descanso mental e incluso a tener por no respondidas aquellas cuestiones que planteen dudas en cuanto a su validez".

La juez atiende con su auto a las recomendaciones del neurólogo Alfredo Robles Bayón, quien tras examinar a Fernández Villa expresó de forma "taxativa" su convencimiento de que el ex secretario general del SOMA puede comparecer, aunque también indicó que tiene dificultades para leer y comprender. Aunque el exsindicalista presentaba lagunas de memoria, el neurólogo se quedó con la sospecha de que su estado era mejor del que aparentaba.

La abogada de la defensa de Villa, Ana García Boto, había presentado un informe pericial alternativo al de Robles Bayón, pero el auto de la magistrada confirma sus peores pronósticos, ya que tras el análisis realizado por Robles Bayón había afirmado: "Soy pesimista, quieren verlo sentando ante la jueza".

La magistrada Simonet Quelle Coto instruye la causa abierta contra el exsecretario general del SOMA, José Ángel Fernández Villa, tras la denuncia interpuesta por el propio sindicato en el que le acusaba de una presunta apropiación indebida.