La Federación Socialista Asturiana atreviesa su mayor fractura en lo que va de siglo. El comité autonómico celebrado el pasado jueves en Oviedo reflejó la división entre los "javieristas", el sector oficial que suscribe la posición del secretario general y presidente de la gestora, y los "criticos", cuyas tesis han encontrado como principal aliado y portavoz en la región al sindicato minero SOMA.

Ambos sectores midieron sus fuerzas en el primer comité autonómico que celebraban los socialistas asturianos desde la dimisión de Pedro Sánchez como secretario general del PSOE y desde el comité federal del 1 de octubre que puso al frente del partido a la gestora que preside Javier Fernández. Su informe político como secretario general de la FSA estuvo marcado por los acontecimientos que siguieron a las elecciones del pasado mes de junio. Fernández argumentó sus reparos a unas terceras elecciones que, en su opinión, hubieran hecho más débil la oposición del PSOE frente al PP.

La contestación llegó de dirigentes de las comarcas mineras, feudo tradicional del sindicato SOMA. Hubo un cuestionamiento a la gestora y a Javier Fernández, y una exigencia de que las primarias y el congreso federal tengan lugar antes de mayo, fecha que los "críticos" consideran clave porque Mariano Rajoy recupera en ese mes la capacidad para convocar elecciones anticipadas.

Hubo 63 peticiones de palabra. Los críticos sostienen que ganaron por la mínima, en cuanto a intervenciones a favor de adelantar el cónclave se refiere, mientras que el sector oficial asegura que hubo un empate técnico. Por momentos, el tono del debate fue tenso, crudo, áspero. Tanto que a la exigencia de respeto por parte de los partidarios de Sánchez, acabó respondiendo Javier Fernández con la lectura de mensajes en Facebook de un miembro del comité autonómico, en los que se le insultaba además de tacharle de "traidor" y "vendido" por posicionamiento a favor de la abstención. "¿Es esto respeto?", vino a preguntar Fernández, quien recibió "una ovación", según el sector oficial, que los críticos rebajaron a "aplauso". Entre los partidarios de adelantar el congreso se pronunciaron los secretarios de Langreo, Laviana, San Martín. Laviana, Riosa, Morcín y Corvera y el secretario general del SOMA, José Luis Alperi, mientras que el secretario general de Avilés se alineó con la tesis de la gestora de esperar a que haya más sosiego interno.