La lucha contra el paro y la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica son los grandes retos del presidente del Principado para 2017, según se desprende de su mensaje de fin de año. Javier Fernández, que encara ya el ecuador de la que será su última legislatura, apuesta por el "diálogo político e institucional" como libro de ruta para su acción de gobierno y pide "perspectiva" al enjuiciar las decisiones de "un año intenso" para Asturias y para España. Fernández, que ha cobrado un protagonismo adicional en el panorama político del país al asumir la presidencia de la gestora del PSOE, sostiene que el interés general ha sido "la guía" de las decisiones tomadas, en lo que parece una alusión al desbloqueo de la situación política de España. "Juzguemos los resultados: las consecuencias para la vida de los ciudadanos, si se resuelven problemas o si se menguan algunas de sus dificultades. Hagámoslo dejando tiempo a la perspectiva", propone el Presidente.

La prioridad del Ejecutivo asturiano, afirma Javier Fernández, será la lucha contra el paro, para menguar "los 84.000 parados en nuestra región" que "son familias, son jóvenes y no tan jóvenes, son la razón por las que nuestro mayor empeño ha de ser la lucha contra cualquier forma de pobreza y exclusión social".

El presidente del Principado también apunta otro de los hitos relevantes en la agenda política de 2017, la reforma del sistema de financiación autonómica, clave para el sostenimiento del llamado estado de bienestar. "Es una cuestión decisiva para contar con servicios públicos iguales y de calidad en el conjunto del territorio nacional (...) Hablamos del núcleo de las políticas por las que ha apostado el Gobierno del Principado, fortaleciéndolas en los peores años de la recesión".

Fernández se muestra esperanzado en alcanzar " consensos para los grandes temas que afectan al futuro de nuestra comunidad" al tiempo que se compromete a dedicar todo su esfuerzo "hasta el último momento de mi mandato" a gobernar desde "el diálogo y anteponer siempre el bien de Asturias".

El Presidente también aprovecha su tradicional mensaje de fin de año para trasladar sus deseos de "bienestar y concordia" al colectivo de asturianos de la diáspora.