El Principado ha dado la orden de regar hoy las carreteras del entorno de Lugones ante el incremento de partículas contaminantes. La falta de lluvia ha disparado la polución en toda el área central de Asturias. En concreto, la estación de Lugones lleva tres días consecutivos superando los 50 microgramos por metro cúbico de partículas de tamaño inferior a las 10 micras (PM 10). Ante este repunte, la consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente ha mandado regar las inmediaciones del centro comercial Intu Asturias, una parte de la antigua carretera Oviedo- Gijón y el enlace de Lugones a la Autovía de la Industria (AS-II).

El Gobierno regional ha pedido también al Ayuntamiento de Siero colaboración para regar en el casco urbano de la localidad. Los operarios ya hicieron lavados a las diez de la mañana y los volverán a repetir a partir de las cuatro de esta tarde. La consejera de Medio Ambiente se reunirá la semana que viene con el Ayuntamiento de Oviedo y las empresas del concejo para tomar medidas contra el benceno en Trubia. Esta sustancia es altamente cancerígena y, junto a la concentración de partículas en suspensión, es la que más contamina Asturias. La Administración recomienda a la población utilizar el transporte público y hacer un uso moderado de las calefacciones.

Las estaciones de Lugones, La Felguera, Salinas y Trubia estuvieron ayer en máxima alerta por mala calidad del aire. La situación se prevé que empeore el lunes con un repunte del tráfico asociado al fin de las vacaciones de Navidad, sin embargo, el Principado descarta restringir el número de coches como Madrid. Por su parte, los ecologistas sostienen que los datos son "crueles" y apreciables: una gigantesca nube ensombrece estas Navidades el corazón de la región. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) espera buen tiempo como mínimo hasta el domingo.

Según la red de calidad del aire del Gobierno del Principado y de la Autoridad Portuaria de Avilés ayer estuvieron en alerta roja cuatro estaciones: Lugones por micropartículas, La Felguera por micropartículas y ozono, Trubia por benceno y Salinas por partículas en suspensión (PM 10). En el caso de Lugones, el pico más alto se registró a las 21 horas del martes, momento en el que los niveles de PM 2,5 alcanzaron los 68 mg/m3. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un máximo de 25 mg/m3 en 24 horas. Un reciente estudio epidemiológico realizado por la consejería de Sanidad confirma que a mayores concentraciones de sustancias perjudiciales mayor es el número de consultas médicas que reciben los servicios de urgencias de la región. La relación se estrecha todavía más con el benceno, presente en niveles muy altos en Trubia: ayer estaba por encima de los 34 mg/m3 cuando lo recomendable es 5.

La red de 23 estaciones fijas del Principado, la mayoría de ellas instaladas en la zona central, dieron también ayer una calidad regular del aire (alerta naranja) en nueve estaciones. El dato más llamativo, el del Matadero de Avilés, que a las 26 horas alcanzó los 121 mg/m3. "Llevamos con acumulaciones importantes días y días. Y el problema es que sigue sin llover", expresa Fructuoso Pontigo, portavoz de la Coordinadora Ecologista de Asturias. "El Paraíso Natural no puede permitirse una polución típica de los años 70", opina por su parte el diputado de Izquierda Unida Ovidio Zapico.

A su juicio, el Principado no puede descartar medidas, como la restricción del tráfico en Madrid, porque "ya vivimos una situación similar". En concreto, en diciembre de 2015 cuando se cortó la "Y" en la entrada de Oviedo. Eso sí, el problema que tiene Asturias no es de óxidos de nitrógeno, como la capital de España, sino de partículas de suspensión generadas por la industria. Juan Carlos Luengo, profesor titular del área de Máquinas y Motores Térmicos del Departamento de Energía de la Universidad de Oviedo, recomienda renovar el parque automovilístico para evitar que en un futuro se den situaciones como las de Madrid. "Los diesel más modernos contaminan mucho menos que los antiguos", explica. La solución según este experto para los óxidos de nitrógeno es lo que se emplea hoy para los camiones: el adBlue.