El Gobierno del Principado ha revocado la gestión de las ayudas predoctorales "Severo Ochoa" a la Ficyt (Fundación para el Fomento en Asturias de la Investigación Científica Aplicada y la Tecnología), responsable hasta ahora de la gestión de esa convocatoria. Estas becas, que ya acumulaban una demora de un año, están destinadas a que jóvenes titulados universitarios inicien su etapa de investigación para doctorarse.
Tras un ejercicio en blanco, pues en 2015 no se convocaron, el Ejecutivo regional aprobaba el pasado julio las "Severo Ochoa" de 2016, una convocatoria dotada con 4,4 millones de euros para 55 egresados, 10 más que en 2014. Para los potenciales beneficiarios, ese llamamiento se realizaba con excesivo retraso: "No comentan nada de qué pasó con la de 2015, cuando eran unas becas anuales. Al final lo que pasa es que hay gente que empezó el doctorado y disfrutará de la ayuda menos tiempo de lo normal, ya que en el momento que la consigan tendrían un año completado", explican fuentes conocedoras de este procedimiento.
La retirada de la encomienda de gestión de estas becas a la Ficyt lleva aparejado que ahora será la Consejería de Educación quien asuma todo el control del proceso de resolución y adjudicación de las becas. La idea, no obstante, es que en la siguiente convocatoria esta tarea pase a manos de la Universidad de Oviedo o, en su defecto, los centros de investigación donde estén esos estudiantes de doctorado. Esos cambios llevan aparajados, al mismo tiempo, que se termine de resolver la situación "indignante" que, a juicio de los aspirantes, se ha dado con la convocatoria del año pasado. Con el ánimo de resolver la indefinición impuesta en torno a estas becas, desde que se resolviera la convocatoria de hace dos años, el 28 de julio de 2016 la Dirección General de Universidades -perteneciente a la Consejeria de Educación- aprobó la convocatoria del programa "Severo Ochoa" de ayudas predoctorales para investigación y docencia. Esta resolución fue publicada en "Boletín Oficial del Principado" el 8 de agosto pasado. Un mes después, el 30 de septiembre, la misma Dirección acordó la tramitación de urgencia de la convocatoria anterior, lo que significaba que los plazos se reducían a la mitad pasando la publicación resolución, de seis meses, a tres, cumpliéndose dicho plazo a mediados de diciembre. Pero, iniciado el nuevo ejercicio, nada parece haber cambiado. Los aspirantes hablan de " oscurantismo" por parte de la Administración que "o no nos informa o aporta informaciones contradictorias", aseguran. A unos les han dicho que antes de marzo no saldrían las listas (aún provisionales) de los beneficiarios. Y hay quien ha recibido el aviso de que no esperen ver finalizado ese trámite hasta junio.
Sea como fuere, los jóvenes doctorandos aseguran estar ya "cansados de que esto nunca acabe y tener que estar siempre pendientes de cuándo saldrá o no la convocatoria, y con qué nueva historia nos vendrán para justificar que no acaben de salir las ayudas", se lamentan.
De hecho, la propia Universidad de Oviedo, consciente del retraso de esas becas, y con el ánimo de facilitar la movilidad de sus investigadores, llegó a abrir su propia convocatoria de ayudas para la realización de estancias en el extranjero a quienes estén matriculados este curso en alguno de los programas de doctorado que se imparten en la institución académica. Para ello se ha reservado una partida de 27.000 euros dirigidos a facilitar la realización de estancias en centros públicos o privados de reconocido prestigio internacional para aquellas personas que hayan sido beneficiarias de las ayudas "Severo Ochoa", cuya convocatoria de 2016 continúa en suspenso iniciado ya un nuevo ejercicio.
"No sé cómo pueden tardar medio año o más en mirar la documentación", protestan los jóvenes investigadores sobre la lentitud de estas "becas tortuga" sobre las que "muchos llevamos esperando por esto año y medio, contratados por grupos de investigación que, a su vez, han visto recortadas sus ayudas".
