El portavoz de IU en la Junta General, Gaspar Llamazares, lamentó ayer "la imagen de confrontación fratricida" que ha salido de la asamblea de Podemos, celebrada este fin de semana en Vistalegre.

"Es un debate que corresponde a otros. Lamento la imagen del confrontación fratricida y la idea de que solo puede haber un líder y una estrategia", valoró el diputado autonómico y responsable de Izquierda Abierta.

"Creo que se ha perdido la oportunidad de hacer autocrítica de las lineas rojas y la frustración del cambio. Tampoco comparto la huida hacia adelante que hace incompatibles personas y estrategias. Prefiero por mala experiencia direcciones corales y estrategias flexibles y de diálogo", declaró Gaspar Llamazares sobre la formación con la que IU fue en coalición electoral en las generales de 2016.

El parlamentario autonómico también se pronunció sobre el congreso del PP, que tuvo lugar en la Caja Mágica de Madrid. "Hemos asistido a un ejercicio de inmovilismo y cinismo a raudales. Inmovilismo frente a la nueva situación, el resultado electoral y el gobierno en minoría y cinismo sobre la corrupción con homenajes a Rita Barberá y sin una mínima autocrítica", reprochó el portavoz de la coalición.

"Entre la doble vida del PP y la vida agitada de Podemos. Falta política y falta izquierda", resumió Gaspar Llamazares, que tampoco eludió pronunciarse sobre los planes de confluencia de Alberto Garzón. "No comparto la fusión ni la absorción. Empobrece a la izquierda y deja huérfana a una parte del electorado progresista. Prefiero la pluralidad y la colaboración. Cualquier acelerón de la confluencia ahora me parece empecinarse en el error y una huida hacia adelante", aseveró el portavoz de IU en la Junta General, donde se ha caracterizado por mantener un discurso bien distinto al de Podemos.

Llamazares ha venido sosteniendo desde el arranque de esta legislatura que la mayoría de las fuerzas de progreso que, en su opinión, representan los 28 diputados del PSOE, Podemos e IU, está perdiendo una oportunidad única para virar a la izquierda las políticas del Principado y, al mismo tiempo, está allanando las opciones a u n triunfo de la derecha en las próximas elecciones autonómicas.