El declive del campo continúa: Asturias perdió casi mil ganaderías por año en las últimas dos décadas. Este es uno de los datos más llamativos del último informe elaborado por la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales (Sadei), que confirma una tendencia descendente en la cabaña bovina desde finales de los años noventa. En la actualidad hay 16.331 explotaciones, un 54% menos que en 1996, que ocupan un millón de hectáreas. La drástica disminución de cuadras afecta sobre todo a la ganadería de leche, que tan sólo representa el 12% del total frente a la de carne, que supone el 85%. El 3% restante corresponde a granjas mixtas. Frente a esta decadencia, las explotaciones regionales casi duplicaron su tamaño al pasar de una media de 12,9 vacas en 1996 a 25,3 el año pasado.

El incremento de reses (413.048) es más notable en las ganaderías de leche que en las de carne. En consecuencia, la producción láctea "se reparte cada vez entre menos explotaciones y se vincula a una menor superficie geográfica". El reciente libro "El sector productor de leche en Asturias, un acercamiento a sus cifras", elaborado por José Antonio Migoya, técnico de Caja Rural de Gijón, y Benigno Fernández, jefe de servicio de la consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, indica que el 90% de la producción láctea se concentra en sólo dieciséis municipios. Según el informe de Sadei, en Gozón se encuentran las explotaciones lecheras más importantes, con un promedio de 500.000 litros por productor durante la campaña 2015-2016, casi el doble que la media regional.

En términos globales, Tineo mantiene su hegemonía, acaparando el 9% de las Unidades de Ganado Mayor (UGM) y el 19% de las entregas de leche. En este concejo están activas en estos momentos 970 explotaciones. Por detrás se encuentran Cangas del Narcea (915), Siero (882) y Villaviciosa (651). En el último año se produjeron cierres en 56 municipios, aunque el caso más grave fue el de Valdés, donde cesaron 25 cuadras. En toda la región clausuraron su actividad 234 explotaciones en 2016. Por contra, abrieron unas 40 en quince municipios y se mantuvieron las mismas en siete localidades.

El estudio del Sadei revela que la raza Asturiana de los Valles es la más abundante en el Principado desde el inicio del presente siglo, llegando a representar en la actualidad el 48% de la cabeza bovina regional, seguida de la raza frisona con el 28%. Por otro lado, la cabaña equina representa el 9,1% y las explotaciones más numerosas están en Tineo y Aller. La ovina y la caprina, que suponen el 1,4% y el 0,9% respectivamente del total, predominan en Cabrales.

La evolución del campo asturiano repercute también en el creciente peso de la actividad femenina al frente de las explotaciones, que no han parado de crecer en los últimos veinte años hasta igualar en número a las regentadas por hombres. Los datos de 2016 confirman que hay 7.707 hombres al frente de una ganadería y 7.676 mujeres. Las cuadras gestionadas por ambos sexos ascienden a 15.382. Por su parte, el número de explotaciones cuya titularidad es asumida por personas jurídicas sigue ganando peso relativo en el conjunto del sector.