Fluidez. Presencia. Cohesión. Y calidad en la argumentación. Estas son, en suma, las claves del éxito del equipo ganador en la Liga de Debate Universitario, que concitó ayer en Oviedo a seis grupos. Tras seis horas de refutaciones sobre si las redes sociales han modificado la libertad de expresión, se disputaron el paso a la final los equipos "Praxeum" y "SADebate A", el primero de ellos con la postura a favor mientras el segundo defendía que no existía cambio alguno desde la explosión de los foros virtuales. "Ha estado bastante igualado", reconocía Alba Morán, como representante del equipo "Praxeum", vencedor de la jornada. Si bien su postura era "más cómoda" ante una moción como la que se les planteaba, "el otro grupo no logró desmontar nuestros argumentos jurídicos" y aportaron leyes que, a su juicio, estaban desactualizadas. Junto a Alba, sus compañeros Eva Bueno, Daniel Menéndez y Diego Sarmiento representarán a la Universidad de Oviedo en la final de la Liga de Debate Interuniversitario en marzo en Mallorca. Podrán viajar con un compañero de su equipo rival, que será Imanol Goicoechea.

Se da la circunstancia de que el equipo ganador en la sesión de ayer es el mismo que el año pasado. Los reyes de la palabra en la Universidad de Oviedo, una mayoría de ellos biólogos, no finalizan con su participación en la Liga de Debate el cultivo de la dialéctica. Además de tomar parte en el Aula de Debate Universitaria durante el primer cuatrimestre, -"con interesantísimas reflexiones", afirman-, recientemente se han incorporado a la Sociedad Asturiana de Debate, un club impulsado por universitarios interesados en el arte de la oratoria.

El equipo "Praxeum" preparó su intervención en dos semanas de "intenso trabajo" y ahora prometen ponerse las pilas y "seguir trabajando mejor" para realizar una intervención "perfecta; no podemos cometer errores de fondo", indican. Su primera lluvia de días, "tomando unas cañas", ha dado sus frutos. Ahora esperan repetir éxito en la final nacional. Los jueces les aconsejan trabajar en la calidad de sus argumentos más que en la puesta en escena. "No son actores, la idea es que cuiden el contenido", recomiendan los profesores del Aula de Debate. Los chavales apoyaron sus argumentaciones con ideas del informático estadounidense Nicolás Negroponte o el sociólogo Salvador Carrrús y aludieron a la denominada ley "mordaza" como ejemplo de los cambios legislativos que limitan la libertad de expresión.