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Día de la Mujer

Las asturianas, lejos aún de las grandes cúpulas empresariales

La proporción de consejeras en las mayores compañías es inferior al 13%, cuando la ley recomienda el 40%

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Coloquio de FADE sobre el Día de la Mujer

El acceso de las mujeres a las posiciones de mayor relevancia y capacidad ejecutiva en las empresas apenas avanza en España y en Asturias, según se infiere de informes e indicadores que permiten hacer el siguiente balance cuando se cumplen diez años de la Ley de igualdad efectiva entre hombres y mujeres: la participación de ellas en los consejos de administración y en la alta dirección de las principales empresas aún está muy lejos de los objetivos que se debieron haber alcanzado en 2015; si la norma "recomendaba" que las mayores compañías tuvieran en ese plazo un 40% de consejeras, la proporción en Asturias no llega al 13%.

La Ley de Igualdad, aprobada siendo presidente del Gobierno el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, establece que las empresas que superen cierto tamaño (las obligadas a formular cuenta no abreviada de pérdidas y ganancias) "procurarán incluir en su consejo de administración un número de mujeres que permita alcanzar una presencia equilibrada de mujeres y hombres en un plazo de 8 años a partir de la entrada en vigor de esta ley". En una disposición adicional se precisaba: "Se entenderá por composición equilibrada la presencia de las mujeres y hombres de forma que (...) las personas de cada sexo no superen el 60% ni sean menos del 40%". Se estableció así una especie de cuota meramente orientativa, no obligatoria y por tanto sin sanciones para quienes no la respeten.

El plazo de ocho años que cita la norma venció el 24 de marzo de 2015. Se llegó a esa fecha y se ha llegado a la actualidad muy por debajo del objetivo. Según un estudio elaborado por la consultora Informa, el 12,92% de las sociedades asturianas concernidas por la recomendación del 40% lo cumplen. Si el cálculo se ciñe a las compañías con mayor plantilla (las que superan los 250 empleos y que por ello están obligadas por la misma ley a disponer de Planes de Igualdad), la proporción de las que cumplen la regla de la paridad baja al 12,92%. Los porcentajes son en ambos casos análogos a los medios de España y apenas han registrado variaciones en los últimos dos años.

El "techo de cristal"" (metáfora que se utiliza en los estudios de género para describir una limitación, no visible pero real, que frena el ascenso profesional de las mujeres) opera en las mayores empresas más que en las de tamaño modesto. Quizás porque en estas, generalmente de propiedad familiar, el protagonismo de la mujer en las primeras y en las posteriores generaciones de propietarios es más intensa. Sobre 16.275 sociedades de este tipo analizadas por Informa en Asturias, el 28,68% tienen al menos un 40% de mujeres como administradoras. Esta proporción no ha avanzado significativamente en los últimos años, si bien supera la media del país (25,95%).

De la escasa participación femenina en las principales cúpulas empresariales da cuenta también este otro dato: entre los 65 consejeros y cargos de alta dirección que suman las tres empresas cotizadas de capital asturiano (Liberbank, GAM y Duro Felguera) únicamente hay 6 mujeres. En esos niveles de responsabilidad, Liberbank tiene tres mujeres (tres consejeras y una directiva, el 13%); GAM, una (directiva, el 7%), y Duro Felguera, una (consejera, el 4,3%). El sanedrín de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE) también es abrumadoramente masculino, con 18 varones y una sola mujer en el consejo ejecutivo de la patronal.

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