La consejera de Desarrollo Rural, María Jesús Álvarez, ha calificado de "comportamiento absolutamente bárbaro" la práctica de dejar lobos muertos en espacios públicos y colgados de señales, como ha ocurrido en las últimas semanas en Parres y en Teverga. Álvarez ha admitido su preocupación por la presencia de lobos en territitorios "donde no deben estar" pero ha asegurado que los expedientes por daños y las indemnizaciones a la cabaña ganadera han experimentado reducciones superiores al 20 por ciento en el período comprendido entre 2012 y 2016. La Consejera ha aportado estos datos durante su respuesta a una interpelación formulada por la diputada de IU, María Josefa Miranda, en el pleno de la Junta General del Principado, cuya primera sesión acaba de finalizar.

Los censos elaborados por la consejería de Desarrollo Rural cifran en 39 las manadas de lobos con presencia estable en Asturias y ha negado que la presencia de este especie esté en regresión, "como sostienen algunos colectivos". Asimismo, la Consejera ha asegurado que el Principado en la actualidad "esta al día en el pago de los daños" ocasionados al sector ganadero. María Jesús Álvarez ha hablado de la necesidad de coordinarse con la comunidad vecina de Castilla y León, donde han aumentado el número de ejemplares de lobo pese a estar considerada como una especie cinegética que, por lo tanto, puede ser objeto de caza, una situación que en Asturias está prohibida, ya que los controles son realizados a instancias de la consejería de Desarrollo Rural.