El poder del fútbol como deporte que despierta pasiones entre sus aficionados es de una potencia incontestable. Un rincón de la Junta General fue escenario de una animada conversación futbolera, a colación de la remontada del Barça frente al Paris Saint-Germain, a la que fueron sumándose el presidente del Principado, Javier Fernández; el portavoz socialista en la Junta, Fernando Lastra; el portavoz de Podemos, Emilio León, y hasta el consejero de Presidencia, Guillermo Martínez. Pocas veces habrán estado en una conversación tan distendida diputados socialistas y podemistas, que hace apenas cuatro semanas protagonizaban un enfrentamiento verbal de lo más enconado en sede parlamentaria. Ayer, con algún que otro tertuliano más, hablaban sobre las habilidades teatrales de Luis Suárez para simular un penalti o del deseo, claro está de un culé confeso, de que al Madrid le toque en suerte un rival alemán "que reparta patadas" a los actuales campeones de la Champions o del rol de la presión de la gente del Camp Nou en el desenlace. Lo que no sea capaz de unir el fútbol...
