"Es un orgullo que reconozcan un trabajo que, en mi caso, con el paso de los años cada vez cuesta un poco más, pero me sigue enorgulleciendo cada día". Con estas palabras agradeció el cabraliego Tomás Fernández, que lleva 27 años como guarda del refugio en el Urriellu, después de cinco en el de Vegarredonda y cuatro en la Vega de Sotres, la distinción otorgada por la Asociación del Grupo de Rescate del Principado de Asturias, que quiso reconocer "su profesionalidad y generosidad en el desarrollo de su labor".

También resultaron premiados en esta tercera edición de los galardones "As de Guías" Miguel Ropero, piloto desde 2004 del Grupo de Rescate de Bomberos de Asturias (SEPA), a quien se reconoció su"devoción, entrega y compañerismo"; la Unidad Canina de Rescate del Principado de Asturias por su trabajo en búsquedas y salvamentos desde su creación en 1990; y el Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU Asturias), por su labor de atención en emergencias sanitarias en las zonas de montaña.

Jesús Gómez y Wenceslao Fernández, que llevan 30 años en la Unidad Canina, reconocieron su satisfacción por recibir "un premio al trabajo, y más por la entidad que nos lo entrega". Por su parte, Miguel Ropero, que lleva pilotando rescates desde 1997, destacó que esta distinción "es una gran satisfacción y un honor", para añadir a continuación que "sin el grupo este premio no sería posible, ya que el éxito es estar juntos en las satisfacciones y también en algún que otro susto que nos llevamos".

Por último, Antonio Trigo, jefe del SAMU, apuntó al recibir el galardón que la clave del éxito en su trabajo es "la buena relación y coordinación con el Grupo de Rescate para realizar las intervenciones".