Las exigencias de transparencia planteadas por Podemos en la Junta General del Principado han hecho aflorar casi 3.000 pacientes más en las listas de espera quirúrgicas de la sanidad pública asturiana. La información públicada ayer en la web de la Consejería de Sanidad, correspondiente a finales de febrero, incluye el parámetro habitual, "número de pacientes en espera estructural", que se cifra en 17.918, lo que implica una ligera disminución con relación a finales de enero, cuando eran 18.258.

La novedad estriba en dos conceptos que nunca antes habían sido difundidos. Por una parte, los "pacientes transitoriamente no programables" [por razones clínicas o porque han solicitado un aplazamiento] son 1.230; por otro, los enfermos que están en espera "tras rechazo de centro alternativo" son 1.733. Estos últimos centraban las críticas del partido morado, que consideraba injustificable que por no aceptar la oferta de operarse en un hospital distinto del suyo dejasen de figurar en los datos oficiales de demoras.

Otras estadísticas nuevas que figuran en la información de la web hacen referencia al número total de pacientes que han entrado y salido de la lista de espera en el mes en cuestión. A lo largo de febrero entraron -porque así lo determinaron los médicos que les tratan- 5.627, y salieron -se supone que porque fueron operados- 6.080. El cuadro de cifra agrega que los enfermos operados en febrero habían soportado una demora media de 119 días.

Entre los 1.733 pacientes que rechazaron operarse en otro hospital, más de la mitad son del área de traumatología (913); les siguen los de oftalmología (368) y los de cirugía vascular (237).

Según un comunicado difundido ayer mismo por la Consejería de Sanidad, ni los pacientes "transitoriamente no programables" ni los que han rechazo un centro alternativo "quedan excluidos de los registros". "El sistema sanitario ofrece una respuesta en red a la demanda de los ciudadanos, que libremente pueden aceptar o no el traslado", señala la nota. Y agrega: "Los datos actuales son significativamente mejores que los de hace un año, lo que indica una adecuada gestión de la lista de espera". Podemos replicó que Sanidad "falsea y presenta de manera retorcida" los datos de demora y que la "lista negra de espera" (la que recoge a los que han rechazado un hospital alternativo) "se duplicó entre 2015 y 2017".