"El lobo en Orbaelle, ahora mismo, pillado in fraganti acechando ovejas... Luego dicen que son perros salvajes". Así tituló Martín García, panadero en Boal, cuatro fotos, sacadas a prisa con un móvil, que dan fe de la presencia de este animal en el interior Coaña.

El avistamiento se produjo a escasos veinte metros de las viviendas de esta localidad coañesa, cerca de una finca en la que pastaban un puñado de ovejas. Anteriormente, había sido detectado en la zona de Sequeiro, según confirman los vecinos, y también en Miñagón (Boal). En esta última localidad, a principios de diciembre, varios ataques causaron temor. En apenas una semana, el cánido se dejó ver a plena luz del día a escasos metros de las viviendas, y atacó varias ganaderías en la zona causando la muerte de cabras, ovejas y caballos. En lugares del vecino concejo de Villayón, como Arbón o Villartorey, el lobo también ha sido el supuesto autor de ataques al ganado.

Pravia es otro concejo donde cada poco salta la alarma. Ayer por la mañana Raúl Rilo, de Peñaullán, denunció un ataque la noche del martes en su ganadería: murieron tres corderos y una oveja en "Lo vi saltar por la alambrada al lobo", asegura. Ayer a la mañana vio el desaguisado. Rilo tiene otra oveja malherida. Los guardas acudieron ayer a revisar los daños.