El Tribunal Superior de Justicia de Asturias ha tumbado el recurso de la asociación conservacionista Lobo Marley contra el decreto de la Consejería de Agroganadería y Recursos Naturales del Principado por el se aprobaba el segundo plan de gestión del lobo en 2015. En cuanto a la crítica de la asociación Lobo Marley de que no son necesarias las medidas de control poblacional del lobo, el magistrado advierte que esta medida de la Administración no es incompatible con la conservación de la especie y su marco de referencia es peninsular. Añade el fallo que el objetivo del plan es garantizar la preservación de la especie, manteniendo un nivel poblacional adecuado que en la región se encuentra estable en torno a las 30 manadas.

Además una decena de entidades conservacionistas han renunciado a participar en el comité consultivo del plan del lobo al considerar "inútil" su presencia por la "anómala" la situación generada por una política "errática e irracional".