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El inicio de la temporada de pesca del salmón con muerte

El campanu reaviva la piquilla entre ríos: "Es bueno competir", afirman en el Sella

Otras cuencas rechazan seguir los pasos de Cangas de Onís y tener sus propias pujas ya que "sería una disputa tonta y absurda" con Cornellana

Alejandro Pérez con el campanu de Asturias, pescado en el Eo, junto al empresario José Antonio Díaz Carbajosa (a la derecha), que se llevó el salmón por 9.500 euros. I. COLLÍN

Los números prueban que el Sella manda en la fiesta del salmón. La subasta del campanu del Oriente superó el domingo en 200 euros al de Asturias, reabriendo una vieja "piquilla" entre Cangas de Onís y Cornellana (Salas). Los 9.900 euros del primero frente a los 9.500 del segundo engrandece la puja del Sella, que empezó en 2011 con el objetivo de "poner en valor su cultura ribereña". "Estamos en nuestro derecho de celebrar una subasta y en la obligación de potenciar nuestras tradiciones", destaca el alcalde de Cangas de Onís, José Manuel González Castro, que defiende que cada río venda su propio campanu. Lo cierto es que el Principado no pone trabas: "La decisión es del pescador". De momento, los aficionados de otras cuencas, como la del Esva, rechazan seguir los pasos del Sella y entrar en "una disputa tonta y absurda" con Cornellana.

"No queremos subastar el del Cares, el del Esva o el del Eo; única y exclusivamente el del Sella", insiste el regidor de Cangas de Onís. ¿Y si el primer salmón del Sella es también el primero de Asturias? "Ahí no entramos, lo dejamos a la voluntad del pescador", agrega José Manuel González. Así sucedió en 2013 cuando se pujó 6.700 euros por el rey de los ríos en el puente romano. "El campanu de Asturias nunca existió, fue una idea de Cornellana y que aplaudo. Pues igual que ellos, nosotros tuvimos la idea de hacer una propia del Sella. Y creo que la propaganda de ambas localidades es valida", reflexiona el presidente de la Sociedad de pescadores "El Esmerillón", Antón Caldevilla. Este ribereño cree además que "la competencia siempre es buena para mejorar".

Lo que pasa es que en el Sella están nadando más rápido que en el Narcea y se corre el riesgo de que el pez pequeño se coma al grande. En la subasta de Cornellana participaron el domingo seis de los once restaurantes inscritos, mientras que en Cangas de Onís fueron catorce y pujaron más alto: 9.900 euros, el mayor precio de su historia. "El Ayuntamiento de Salas debería apostar más por su subasta", reconocen los pescadores. La directora de la feria del salmón y a la vez concejala en el concejo, Ángeles Fernández, sostiene que cada río puede subastar su campanu, pero nunca será el de Asturias. Cornellana acaba de renovar la patente (hasta 2027) de la famosa puja y resta importancia a que el Sella le supere en el precio. El presidente de la Sociedad Las Mestas del Narcea, Enrique Berrocal, opina por su parte que el campanu fue "un éxito" a pesar de la competencia de Cangas de Onís.

El responsable de la asociación La Socala, Gil Rico, descarta organizar una subasta propia en el Esva para "no levantar polvo". "No tenemos el mismo tirón que el Sella y el Narcea y sería entrar en una dinámica mala para el sector pesquero", concluye.

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