La interconexión de los sistemas para permitir los trasvases de recursos hídricos entre las diferentes comarcas del Principado es uno de los objetivos que se marca ahora la Administración autonómica en el plan de abastecimiento para las dos próximas décadas que pretende adjudicar en breve. Para ello, estima de "especial relevancia" determinar el alcance del agua excedentaria en los territorios más favorecidos que sea susceptible de ser utilizada en otros ámbitos territoriales. Además, el Gobierno regional aboga por "soluciones no convencionales", entre ellas la reutilización de aguas tratadas de los sistemas de saneamiento y depuración, o el aprovechamiento de las derivadas del achique de explotaciones mineras o ferroviarias.
El Consorcio para el Abastecimiento de Agua y Saneamiento en el Principado de Asturias (CADASA) descartó en 2007 la posibilidad de trasvasar agua desde el embalse de Arbón (Villayón) a los municipios de la zona central de Asturias. El organismo veía entonces inviable la propuesta, planteada por el geógrafo Aladino Fernández, porque, según sus cálculos, llevar agua desde el valle del Navia al eje metropolitano encarecería el precio del litro, que se multiplicaría hasta por seis.
Por otra parte, el consorcio autonómico estimaba que para lograr que la presa de Arbón surtiera al eje metropolitano sería necesario ampliar el caudal de 300 litros por segundo previsto en la obra del trasvase desde Villayón a los municipios de la rasa costera occidental.
