La crisis de la Consejería de Empleo, Industria y Turismo se cobra dos nuevas dimisiones. La directora general de Industria y Telecomunicaciones, Sandra Velarde Suárez, y el director general de Innovación y Emprendimiento, Francisco Delgado, consumarán su renuncia a partir de hoy, siguiendo los pasos del consejero Francisco Blanco, que la pasada semana anunció su salida del Gobierno de Javier Fernández. Ambos directores fueron fichajes personales de Blanco y ambos también compartían con él su malestar por la falta de margen presupuestario, un asunto que, según fuentes conocedoras, había tensado las relaciones con la Consejería de Hacienda que pilota Dolores Carcedo.

Velarde y Delgado volverán a sus trabajos docentes en la Universidad, al igual que hará el consejero Francisco Blanco. Sandra Velarde llegó a la dirección general de Industria hace menos de un año, cuando en junio de 2016 el puesto quedó vacante por la marcha de Luis Ángel Colunga, exdirigente sindical de Arcelor que dejó el Principado para convertirse en "número dos" del sindicato europeo Industriall Europe. Velarde no tenía experiencia en política, aunque sí en la gestión universitaria, como directora del Instituto de Tecnología Industrial de Asturias y subdirectora de la Escuela de Ingeniería de Gijón. Ahora se reincorporara a su puesto como profesora titular del Departamento de Energía.

Francisco Delgado Rivero también llegó del mundo académico. Economista y profesor de Hacienda Pública, retorna a la docencia a los dos años de haber aceptado el ofrecimiento de Francisco Blanco, compañero suyo en la Universidad de Oviedo, para incorporarse a su equipo.

Según trascendió ayer, el ya exconsejero de Empleo había sugerido a Velarde y a Delgado que continuarán en sus puestos para colaborar con su sucesor al frente de la Consejería, Isaac Pola. Aunque la relación con éste último es buena, ambos directores generales han decidido dimitir, indicaron las fuentes consultadas, movidos por las mismas razones que se atribuyen a Francisco Blanco: la insatisfacción por la poca capacidad de maniobra y la falta de recursos para la gestión. Fuentes cercanas al Gobierno explicaron que las relaciones de Blanco con la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, eran tensas ya desde las conversaciones para la elaboración de los primeros presupuestos del Ejecutivo. Otras fuentes explicaron que durante sus dos años en el puesto el consejero tuvo también dificultades para encajar en el departamento que antes lideró Graciano Torre.

La Consejería de Empleo, Industria y Turismo, uno de los departamentos clave del Gobierno y el más pegado al mundo económico, queda ahora en manos de Isaac Pola, hasta ahora director general de Energía y antes miembro de los equipos de Torre. Desde esta semana, Pola habrá de hacer frente al nombramiento de tres nuevos directores generales para cubrir su propia vacante y las de los dimisionarios Sandra Velarde y Francisco Delgado. La Consejería tiene tres direcciones generales más cuyos titulares se mantienen: Julio González Zapico, responsable de Comercio y Turismo, y excolaborador de Torre; Antonio González, director de Trabajo y también procedente del equipo anterior, y Víctor Manuel Solla, director de Tecnologías de la Información y la Comunicación, que lleva cuatro meses en el puesto.