Un texto del poeta asturiano de la Generación del 27 Ángel González abrió ayer el primero de los ejercicios de la nueva selectividad, conocida como EBAU (Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad). El estreno de las pruebas, "después de un año intenso, incierto, tras muchas penalidades, gracias al trabajo de mucha gente", según explicó la vicerrectora de Estudiantes, Elisa Miguélez, fue para muchos alumnos "más fácil" de lo previsto. Esa era la opinión de Eduardo López, del Instituto César Rodríguez, de Grado. "Pensé que iba a ser más complicado", reconoció este joven moscón recién finalizado el examen de Lengua, con preguntas también sobre los poetas del 27, la novelística de Miguel Delibes, Fernando Savater y sus obras más significativas o Luis Cernuda y los poetas de la generación del 25. Como prueba de lectura los alumnos podían escoger entre "Luces de Bohemia" de Valle-Inclán o "Ética para Amador", de Savater.

La vicerrectora de Estudiantes subrayó que la nueva EBAU resulta "bastante parecida" a la antigua Selectividad. Así lo atestiguaron los alumnos. Lidia Álvarez, del Colegio Auseva, primera en terminar el examen en el aulario de la Facultad de Economía y Empresa, en Oviedo, reconocía que pese a haber comenzado el examen "supernerviosa" después le tranquilizó el ejercicio: "Fue bastante fácil, estábamos entrenados con los simulacros que hicimos en clase todo el año. No fue para tanto", aseveró la joven, quien confía iniciar el próximo curso estudios de Economía. Menos convencida salió su compañera Paula Martínez, también alumna del Auseva: "De momento me fue bastante mal", subrayó sobre el examen de Lengua, "llevaba otros más preparados pero el que más miedo nos da es Historia. Hemos sido conejillos de indias del Gobierno", protestó la joven en alusión a la decisión final de que en esta asignatura el temario abarcara desde la Prehistoria hasta el inicio de la democracia en España.

La vicerrectora de Estudiantes recordó que el temario ha tenido que adaptarse al nuevo currículo de la Lomce y fue una orden ministerial del pasado diciembre la que marcó los estándares de aprendizaje. No obstante, Elisa Miguélez precisó que esa orden señalaba que el 70% de esos estándares que eran obligatorios para la prueba, con posibilidad de añadir un 30%. "En Asturias hicimos que ese 70% fuera el 100%, es decir, que no añadimos absolutamente nada", precisó," e incluso en muchas materias se ajustó a la baja". La asignatura de Historia de España era, sin duda, la que más preocupaba ayer a los bachilleres asturianos. Ana Fernández, Adrián González, Pablo Flórez y Andrea González coincidían con Adrián Pérez, Pablo Cañal y Álvaro Barriada, todos ellos alumnos del Auseva, en que casi hasta el mes de marzo no se les habían concretado los temarios de Historia.

En el examen de esta materia se pedía a los alumnos desarrollar el proceso de romanización de los pueblos de la Península Ibérica, la política española respecto al problema con Cuba, las fuerzas de apoyo y oposición durante la Segunda República y los grupos ideológicos durante el franquismo en España. La segunda opción a escoger en Historia de España incluía el reino de Asturias, la conquista de América, el desarrollo de la red ferroviaria española, las reformas de la República, y las actuaciones impulsadas por el presidente del Gobierno Adolfo Suárez, además de la última dinastía musulmana en Granada.