José Antonio_Postigo no solo se hizo con fondos presuntamente a través de la obra del geriátrico del Montepío en Felechosa. Anticorrupción sostiene que también desvió más de 300.000 euros engordando -”incrementado indebidamente”, resalta el fiscal en su querella- los presupuestos de las empresas de limpieza de los residenciales del Montepío en Roquetas de Mar (Almería) y Los Alcázares (Murcia). El ministerio público añade que José Ángel Fernández Villa “situó” a su mano derecha primero en la Comisión Regional del Montepío y luego, a partir de 2006, en la presidencia de la entidad mutualista. Con el beneplácito del que fuera secretario general del SOMA, Postigo “abusó” y desempeñó de forma “torcida” sus cargos, desviando los fondos que luego se repartirían entre ambos y que afloraron en la amnistía fiscal de 2012 -recientemente anulada por el Tribunal Constitucional-, con la complicidad de sus familiares, que les habrían ayudado.

En el caso del residencial de Roquetas, Postigo infló presuntamente los costes de limpieza, entre los años 2003 y 2005 -cuando aún no era presidente del Montepío-, en al menos 138.331,69 euros, “utilizando una empresa interpuesta entre el Montepío y la sociedad que prestaba realmente el servicio”.

En el caso de Los Alcázares, Postigo “se concertó presuntamente con su pareja sentimental,_Dorina Bicher, y con (la empresaria de limpieza) R._D. T. para sustraer fondos del Montepío utilizando la facturación ficticia de una mercantil interpuesta”. A través de esta compañía, “Dorina Bicher resultó beneficiaria directa de un total de 164.919,26 euros ingresados en su cuenta personal del Banco de Sabadell por el residencial de Los Alcázares que ella misma dirigía”, según reza la querella.

Como se sabe Anticorrupción empezó a tirar del hilo después de saber que, en una sucursal del BBVA de Oviedo, el 5 de noviembre de 2012, Villa y sus familiares realizaron la regularización fiscal de 1,2 millones de euros, pagando el 10 por ciento en concepto de impuestos. Villa realizó un ingreso de medio millón de euros; su mujer, 400.000, y sus hijos Rolando y Ángela, 150.000 cada uno de ellos. Los querellados manifestaron que el dinero procedía de una herencia, “que no acreditaban”. Anticorrupción considera que ese dinero “no puede proceder de una herencia, confirmándose por tanto la mendacidad de las manifestaciones del asesor José Manuel Fernández (de Aucontor), en el momento de realizar dichas declaraciones tributarias”._Y es que Villa “únicamente percibió de su madre la cantidad de 28.904,84 euros el 13 de abril de 2011”. Esas cantidades, además, no pueden proceder de sus ocupaciones profesionales ni de otros rendimiento de carácter lícito, “al no haber tenido nunca dicho núcleo familiar tal capacidad de ahorro”.

Mujeres e hijas

Tirando del hilo, Anticorrupción supo además que Postigo “se sirvió de dichar regularización fiscal para aflorar 463.100 euros obtenidos de forma presuntamente fraudulenta”. El fiscal indica en su querella que, “a la vista de la información fiscal y bancaria”, las percepciones económicas percibidas entre 2003 y 2014 por Postigo “no pueden justificar ni la regularización fiscal especial a la que se acogió en el año 2012 junto a su hija Patricia, ni en una notable cuantía compras realizadas para él o para alguno de los miembros de su familia”.

Tampoco la que fue su esposa hasta 2014, María Elena Pérez, ni sus dos hijas, ni si pareja desde al menos 2014, Dorina Bicher, “han podido ser la fuente de obtención de las cuantías económicas no justificadas, conforme a las rentas declaradas y contrastadas como rendimientos fijados por la Agencia Tributaria y la Tesorería General de la Seguridad Social”.