José Antonio Postigo, expresidente del Montepio de la Minería y mano derecha de José Ángel Fernández Villa, presuntamente cobraba "comisiones ilícitas" que "iban del 3 al 20 por ciento", según recoge la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en uno de los informes del "caso Hulla".

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"No solo se han encontrado indicios del presunto enriquecimiento procedente del cobro de comisiones durante las obras de ejecución de la residencia de Felechosa. Existen circunstancias que evidencian como José Antonio Postigo, presidente del Montepío, habría podido conseguir pagos de ciertas cantidades de dinero en concepto de comisiones ilícitas", sostienen los investigadores.

Varias eran las vías para conseguir esas "mordidas". Por ejemplo, mediante el incremento de los costes de servicios que se prestaban (como los trabajos de limpieza de la residencia del Montepío en Roquetas de Mar), o exigiéndolas directamente a los proveedores del Montepío por su contratación. Los investigadores señalan que Postigo "se habría servido de su posición y de las facultades al frente del Montepío para facilitar todo el proceso mediante el cual se contrataba con los proveedores seleccionados".

Precisamente, Postigo ha acudido esta mañana a los juzgados de Oviedo para cumplir con la orden de comparecer el día 1 y el 14 de cada mes. La jueza le impuso esa exigencia para dejarle en libertad provisional. También estuvieron en el juzgado el constructor del geriátrico, el arquitecto y el asesor del Montepío.