Usuarios del tren de la extinta Feve denuncian el deterioro progresivo del servicio y un brusco incremento de la frecuencia de los transbordos por carretera que deben soportar al menos en la línea Oviedo-Santander. Las protestas se han acrecentado a la vista de que diversas deficiencias en el servicio justifican un fin de semana sí y otro también, lamenta una pasajera habitual, la obligación de hacer en autobús o taxis, con la molestia y los retrasos consiguientes, parte del trayecto entre Llanes y Pola de Siero. Ocurrió el pasado domingo igual que varias veces las semanas anteriores y las quejas de los usuarios van en aumento, asegura.

Es en este contexto en el que el grupo parlamentario de IU llevará esta semana al pleno de la Junta una pregunta al Gobierno sobre el desplome de la vía estrecha en Asturias. Porque Feve ya es, según el portavoz de la coalición, Gaspar Llamazares, "una contrata de transporte por carretera más que una empresa ferroviaria".