La desbandada de empleados públicos ha empezado en Asturias. Cada año ya se jubilan más de un millar de funcionarios y laborales que trabajan para la Administración. Los sectores más afectados por la pérdida de personal de los servicios públicos, que seguirá al alza en los próximos quince años, son la educación, la sanidad, la justicia y los servicios generales de la Administración. La situación no es exclusiva del Principado. Las "vacas gordas" de las oposiciones se remontan en toda España a los años ochenta del siglo pasado, período en el que las mayorías de las autonomías comenzaron la construcción de sus respectivas plantillas. La crisis de los 90 congeló las contrataciones públicas y la más reciente, desde 2010, supuso el mayor "tijeretazo" en tasas de reposición y derechos.
El envejecimiento de las plantillas es general en los tres ámbitos de la Administración, ya sea local, autonómica o estatal. El relevo en los próximos 15 años se hace obligado y prioritario en los servicios públicos esenciales como la sanidad, la educación, la justicia, los servicios sociales y los servicios generales. La radiografía del empleo público en Asturias arroja como principal diagnóstico que, por ahora, la oferta de plazas está muy detrás de las necesidades reales, según las previsiones que manejan los sindicatos. El Gobierno regional ha iniciado los contactos con los sindicatos para discutir las cifras sectoriales. De momento, 260 plazas para las consejerías.
Sanidad
La jubilación de 1.300 médicos en los próximos ocho años pone en riesgo el relevo generacional en la sanidad pública asturiana. Medio millar de ellos pasarán a situación de retiro hasta 2020 y los 800 restantes a lo largo del lustro siguiente, según las cifras que maneja la consejería de Sanidad. La próxima década será crítica por el paso a la reserva de las primeras promociones que se formaron en la facultad de Medina de Oviedo. El Principado anunció el pasado año la convocatoria de una oferta pública de 522 plazas, cuyas pruebas se han venido realizando en el primer semestre de este año pero algunas aún no están resueltas.
Educación
Sólo en esta área se jubilan cada año una media que se aproxima a los 400 profesores y la tendencia no irá a la baja en los próximos ejercicios porque está consolidada hace tiempo, según sostiene Emma Rodríguez, del sindicato Suatea. En 2013 se jubilaron 379, en 2014, 304, en 2015 fueron 403 y el pasado año 338. En los años noventa apenas hubo oposiciones en este ámbito y ahora el nivel de interinos es de los más altos del país. "En algunos centros, el claustro cambia en su totalidad cada curso", coinciden diversas fuentes sindicales. La edad media de la plantilla fija tiende al alza: el pasado año 22 profesores solicitaron permiso para ampliar su vida laboral más allá de la edad de jubilación. "Más que nunca", confirma Emma Rodríguez.
Justicia
Más de doscientos funcionarios del millar que compone la plantilla tienen más de 60 años y, al menos un tercio, ya pasa de los cincuenta, según comenta Cristina Esteban, del sindicato CSIF. Desde que el Principado asumió esta competencia no se han convocado oposiciones y los concursos de traslado, para los que hay un convenio con Cantabria y Castilla-La Mancha, no tienen las misma agilidad que en esas otras dos autonomías.
Servicios generales
Las edades de la mayoría del personal que trabaja en las consejerías del Principado oscilan entre los 45 y los 55 años. La edad media se sitúa en los 52 años, según los datos que obran en poder de la administración autonómica. "La media elevada de edad es una evidencia. No se ven trabajadores de 25 y 30 años en las oficinas y departamentos del Principado", argumenta Sergio Peña, presidente del sindicato CSIF, quien sostiene que serán necesarias macro oposiciones en un futuro.
