El presidente del Principado, Javier Fernández, calificó como una de las épocas más interesantes de la historia de Asturias la del Prerrománico, en torno a la que gira la exposición de LA NUEVA ESPAÑA en la Feria de Muestras, "Santullano, viaje al siglo IX", que ayer visitó el presidente regional.

La exposición traslada a los visitantes a través del uso de los sentidos, en un viaje multisensorial, hasta la corte de Alfonso II, quien entre los años 820 a 825 erigió la iglesia de San Julián de los Prados, o Santullano, catalogada como patrimonio de la humanidad. El plato fuerte de la muestra es la recreación, con gafas de realidad virtual, de cómo eran los frescos del templo cuando se pintaron, hace casi 1.200 años. Fernández tuvo ocasión en su visita de percibir los olores, sonidos y el tacto de la iglesia y otros elementos de la época.

Hasta tal punto considera el presidente regional interesante esa época histórica que indicó que "si hubiésemos tenido dinero, me hubiera gustado encargar una serie de televisión sobre la época de la monarquía asturiana", al estilo de otras series sobre la historia de España que se han realizado para la pequeña pantalla.

El presidente de Asturias también bromeó con la ocurrencia del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que defiende que el Rey Pelayo era cántabro.

La visita de Javier Fernández al pabellón de LA NUEVA ESPAÑA formó parte del recorrido institucional por la Feria de Muestras, que llevó al presidente del Principado a visitar 22 pabellones y stands en cuatro horas y media incluyendo los de los ayuntamientos de Gijón, Oviedo y Langreo, los Puertos y diversas empresas.

Casco y tabla de surf

Ingeniero de minas de profesión, en varios momentos del recorrido el mandatario autonómico se interesó por temas relacionados con la minería. Se puso y luego se llevó para casa un casco minero en el stand de Hunosa, en el que elogió la recreación de la lampistería, casa de aseo y testero (taller de picadores tradicional) y recordó que en su época de actuario de minas usaba botas más altas que las que se exhibían. En el pabellón de Masaveu se detuvo ante un cuadro de Mariano Moré que muestra a un minero en un paisaje de montaña, señalando que hizo llevar a su despacho uno similar del museo de Bellas Artes. Si en el stand de Hunosa el presidente se puso gustoso el casco minero, el director comercial del Banco Sabadell-Herrero, Alfredo Fernández Santos, no pudo convencerle para que se subiera a una tabla de surf para simular que cabalgaba una ola. Los equilibrios al final los tuvo que hacer el directivo bancario, sujetado por Fernández.