"Estaremos vigilantes". Ese es el mensaje que Izquierda Unida lanza a la consejería de Medio Ambiente tras aprobarse el miércoles en Consejo de Gobierno los nuevos planes de mejora de calidad del aire de Gijón, Avilés y Trubia (Oviedo). El objetivo es aumentar la presión sobre las empresas generadoras de gases y de partículas contaminantes. Un paso importante, según la coalición, pero "poco ambicioso" en el caso del puerto gijonés.

"Es uno de los referentes de la fachada atlántica y sin embargo en materia de polución está al nivel de los puertos africanos", critica el diputado Ovidio Zapico, que reclama un "gran pacto" de la industria para combatir la contaminación en Asturias. "No sólo hay que tomar medidas concretas, sino también políticas", insiste. "Creemos que con la anterior Consejera (Belén Fernández) el diálogo entre Gobierno e industria fue francamente malo; esperamos que el nuevo titular (Fernando Lastre) lo encauce mejor", añade el diputado, que pide "una red de transporte público sostenible".