El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) ha denunciado ante la Fiscalía de Medio Ambiente la autorización por parte del Gobierno regional de que los cazadores puedan abatir lobos en Asturias. La organización conservacionista califica de "retrógrada e ilegal" la medida que impulsa la consejería de Medio Ambiente para disminuir la presión de la especie sobre la ganadería. Los ecologistas piden la suspensión cautelar de las batidas, ya que "el daño causado -la muerte de los ejemplares- será irreversible", avisan. WWF dice además que el Principado "erradicará a la especie de un tercio del territorio asturiano". La Consejería, por su parte, insistió esta semana que "ni vamos a exterminar al lobo ni actuamos fuera de la ley" y aseguró que la intervención de cazadores en el control de la población será "puntual, no genérica".

"La caza del lobo se desarrollará en las zonas de presencia esporádica de la especie permanentemente sin limitación de cupo, una medida indiscriminada que supondrá la muerte de cualquier ejemplar -machos, hembras, jóvenes, adultos, cachorro...- y en cualquier momento del año, sin ni siquiera respetar la época de cría", expresa el Fondo Mundial para la Naturaleza. "Autorizar batidas de lobos a manos de cazadores particulares, con el objetivo de erradicar a la especie de regiones enteras de Asturias, es un despropósito y un regreso al pasado. Volver a tratar al lobo ibérico como una alimaña a extinguir, como se hacía a mediados del siglo pasado, es impropio de una sociedad que se dice civilizada", añade el secretario general de WWF España, Juan Carlos del Olmo. La organización considera "injustificable" permitir "la erradicación de una especie protegida por la alarma social".