Puede resultar paradójico, pero ejercer la prostitución no es lo mismo que trabajar en el alterne. La primera es una actividad atípica, no reglada, que no requiere por tanto de la inscripción de quienes la desarrollan en la seguridad social. Es una actividad en el limbo, y que solo es perseguible en caso de que se realice bajo coacciones. El alterne, entendido como actividad de promoción del consumo de bebidas alcohólicas (eso sí, a precios desorbitados) en un determinado establecimiento, sí exige por contra que las trabajadoras estén dadas de alta en la seguridad social. A esta dicotomía se agarró ayer la defensa de Miguel Ángel López Robledo, administrador en su día del club Model's, para solicitar la libre absolución de su cliente. Como mucho, en el Model's se ejercía la prostitución, no el alterne. Por tanto, mantuvo el letrado Ricardo González, no había obligación de asegurar a las trabajadoras.

En la jornada final del juicio, celebrado en la sección tercera de la Audiencia, La Fiscalía mantuvo no obstante las penas solicitadas, el cierre del local por dos años y una pena de dos años y medio de cárcel para López Robledo y para el encargado del local, Renato Fernández. Las defensas se agarraron a la falta de testigos. En la mañana de ayer tenían que haber comparecido una veintena de mujeres que trabajaron en el local, pero solo acudieron dos de ellas, y para dar parcialmente la razón a los acusados. "Yo trabajaba por mi cuenta, no hablé con ellos sobre las condiciones. Eran los clientes quienes me pagan un porcentaje por las copas, no el club", aseguró una de las dos testigos.

El abogado de Miguel Ángel López Robledo llegó a acusar a la Fiscalía de concertarse con el único camarero que ha asegurado en la vista que el Model's era un club de alterne. El abogado Ricardo González indicó que el camarero H. G. G. no tiene credibilidad puesto que está enemistado con el club, porque quiere dejar de trabajar cobrando una sustanciosa indemnización, a lo que la empresa se niega. Por otro lado, minimizó las declaraciones de los guardias civiles e inspectores de Trabajo, porque no se han visto corroboradas por las mujeres que estaban en el local. En la jornada del martes, uno de los guardias llegó a indicar que el Model's era "el mayor prostíbulo de Asturias". El dueño, el encargado y varios camareros le enmendaron la plana: el Model's es una sala de fiestas, no un club de alterne.

Por su parte, Jesús Villa, abogado de Renato Fernández, adujo que éste no tenía capacidad ni obligación de asegurar a las trabajadoras, puesto que era un simple empleado, aunque con capacidad para dar órdenes. Para justificarlo, sacó a colación una sentencia de principios de este año, dictada por la sección segunda de la Audiencia Provincial, que absolvió a López Robledo por otro delito contra los derechos de los trabajadores, porque no pudo demostrarse que el Model's fuese un local de alterne. Ahora le toca el turno a la sección tercera. Del sentencia será ponente la magistrada Ana Álvarez Rodríguez.