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El envejecimiento de la Universidad se agudiza: uno de cada cinco docentes pasa de 60 años

Las disciplinas médicas aglutinan el profesorado más veterano Los más jóvenes son ingenieros, abogados y físicos

El envejecimiento de la Universidad se agudiza: uno de cada cinco docentes pasa de 60 años

El declive demográfico llega al campus. La Universidad asturiana sufre de primera mano el envejecimiento de su plantilla, tanto que la edad media de uno de cada cinco docentes se encuentra por encima de los 60 años. La realidad, aunque conocida, suma una doble problemática. El plan estratégico de la institución académica hasta 2022 recoge como objetivo para esa fecha lograr que en ningún área de conocimiento supere la barrera de los 60 años en los próximos cinco años. Habrá que emplearse a fondo para que las 27 áreas que actualmente superan esa franja de edad logren mejorar y rejuvenecer sus plantillas.

Los rectores del Grupo 9 de Universidades (G-9), ya advirtieron en varias ocasiones de su "preocupación" sobre varias cuestiones que afectan al sistema universitario español, principalmente las referidas a las limitaciones impuestas a la tasa de reposición del profesorado, que ha derivado en un freno al rejuvenecimiento de las plantillas. "Pedimos autonomía para gestionar nuestro personal, no más dinero, porque somos conscientes de en qué situación se encuentra el país", recuerdan desde el G-9. La más "preocupante" para los rectores se palpa en las facultades de Medicina, donde se estima que en los próximos diez años no habrá suficiente personal para atender al necesario relevo generacional, al jubilarse un 40% de sus docentes.

En la Universidad asturiana las áreas más envejecidas se corresponden precisamente con disciplinas médicas. En Traumatología y Ortopedia la media de edad es de 67 años, y una mayoría del profesorado es asociado. En Filosofía e Historia se hallan en idéntica tesitura: 67 años de media. En Anatomía Patológica, Paleontología, Didáctica de las Ciencias Experimentales y Zoología, el profesorado se halla en la franja de 66 y 65 años. Cirugía, Medicina Forense, Radiología, Obstetricia y Ginecología, Medicina y Enfermería también superan los 60 años.

Especialmente significativo es el caso de Estomatología, un área que roza el cien por ciento de su capacidad docente con solo nueve contratos indefinidos como personal docente e investigador mientras que existen 81 asociados. También cuentan con un elevado número de profesores de esta categoría en Medicina, (52), Cirugía (21), Medicina Preventiva y Salud Pública (14), Fisioterapia (40), Máquinas y Motores Térmicos (20), Derecho Civil (26), Filología Inglesa (28) y Mecánica de Fluidos (14), que se corresponde, precisamente, con áreas que se encuentran muy por encima de su capacidad docente. La más sobrecargadas son Urología y Educación Física y Deportiva del departamento de Biología Funcional, que se encuentran al 170% y 163% de su capacidad docente. Ambos cuentan con dos asociados.

Lo más grave en todos estos casos es que no existe lo que se denomina plantilla joven. El área de menos edad, Didáctica de la Matemática, del departamento de Estadística, tiene una media de edad de 41 años, por delante de los 42 de Prehistoria y 43, de Teoría de la Señal, que hace una década aglutinaba a la plantilla más joven de la Universidad de Oviedo, al rondar una mayoría de su personal los 33 años. En líneas generales son los ingenieros (de las ramas Eléctrica, Construcción y Agroforestal) los que presentan unas ratios de edad más favorables, todas ellas por debajo de los 50 años. Físicos y abogados son el otro grupo de la Universidad de Oviedo con una mayoría de su personal docente en la franja de 45 años de edad.

En su conjunto, la plantilla de la Universidad asturiana se sitúa cuatro puntos por encima de la media de edad estatal: 52 años frente a los 48 del sistema universitario español. Además, según reconoce el Rectorado, la jubilación de una parte muy importante del profesorado en los próximos años puede generar "un gran vacío" en los equipos docentes e investigadores "difícil de suplir".

Como acciones inmediatas se sugiere contratar profesorado ayudante doctor en las áreas más envejecidas, ofertar más plazas de ayudante doctor y de investigadores posdoctorales para favorecer así la incorporación de nuevo talento a las aulas y desarrollar asimismo la figura de profesor contratado doctor vinculado.

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