"Ophelia" traerá aún más calor al Principado en un puente festivo de éxito turístico. El huracán, que hoy se sitúa al sur de las Azores, tocará mañana tierra española y su incidencia sobre Asturias se traducirá en una subida notable de las temperaturas. Los termómetros alcanzarán los 30 grados en el interior e incluso el litoral de la región, debido "a la conjunción del ciclón y de un anticiclón europeo, que originará viento sur", según el delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología, Manuel Antonio Mora. El buen tiempo beneficia al sector hotelero, que está teniendo "buenas" ocupaciones, aunque los empresarios dudan de que esa afluencia repercuta en una mayor rentabilidad.

"Siempre nos fijamos en la ocupación y eso no siempre trae consigo un buen resultado económico. Estamos en una coyuntura positiva, pero no es para tirar cohetes", remarcó ayer uno de los vicepresidentes de la patronal turística Otea, Fernando Corral. El hotelero asegura que el Pilar siempre es un buen puente, sin embargo, "hay que pensar que hay muchos meses a lo largo del año en los que estamos por debajo del 30% de ocupación". La media anual, de hecho, se sitúa en un 47%, según Corral, que recalca que el tiempo "influye" y, en este caso, positivamente.

En el ámbito rural, Adriano Berdasco, responsable de la Federación Asturiana de Turismo Rural, sostiene que el puente está funcionando "mejor que el año pasado", con un ocupación "de entre el 85 y el 90%". "En el Pilar siempre hay mucho turista, al contrario de lo que ocurre en el puente de noviembre, que lleva años de capa caída. Veremos éste", comenta.

Ayer el sol animó a multitud de turistas a salir a la calle. Los termómetros alcanzaron la máxima de 26,4 grados en San Antolín de Ibias. En Oviedo, la temperatura máxima fue de 20,8 y en la costa, como es el caso de Gijón, de 19,3. La estabilidad meteorológica continuará hasta el lunes, cuando ya se espera la llegada de las primeras lluvias. Mientras tanto, el sol estará asegurado todo el fin de semana. El domingo, el mercurio llegará hasta los 30 grados por acción del huracán "Ophelia", aunque en "zonas altas de la Cordillera -explica Manuel Antonio Mora- es probable que se registren vientos de intensidad fuerte, incluso se formará nubosidad de evolución diurna con probabilidad de algún chubasco". En Galicia, la depresión extratropical generará a última hora de la jornada rachas de viento de entre 70 y 90 kilómetros por hora.

Desde el día 3 sin llover

El delegado territorial de la Aemet advierte que aunque las temperaturas sean notablemente más altas de lo normal, "no hay que olvidar que estamos en otoño". Eso significa que "las noches comienzan a ser más largas y las temperaturas mínimas son relativamente bajas". La escasez de lluvias este mes en el Principado "no es una situación excepcional", dice Mora, ya que "con situaciones anticiclónicas de bloqueo como la actual puede estar una o dos semanas sin caer ninguna precipitación". Como prueba de esta inestabilidad otoñal está Oviedo, en donde lleva 11 días -desde el 3 de octubre- sin llover "a excepción de orbayus inapreciables".

De momento, en la capital, según datos de la Aemet, llevan caídos tan solo 6 litros por metro cuadrado, cuando el mes pasado se acumularon 68,5. Algo similar sucede en la estación del Aeropuerto de Asturias, en Castrillón, con 8 litros registrados en lo que va de octubre -no llueve desde el día 6- y, en cambio, en septiembre fueron 102,2 litros. Los chubascos podrán ser especialmente intensos a mediados de la próxima semana.

Aunque el verano fue normal, el balance de precipitaciones de 2017 marca un déficit del 20%, al igual que el año pasado. Se trata de un porcentaje nada alarmante, puesto que "ocurre con relativa frecuencia", concluye Mora.