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Asturias pierde 150.000 consultas al año con el especialista porque el paciente no acude

Sanidad habilita una aplicación de móvil en Arriondas para que el usuario avise de que no va a ir "Hay que atajar ineficiencias", afirma el Sespa

Área de consultas externas del Hospital San Agustín (Avilés). LNE

Los médicos de los hospitales asturianos atienden cada año 1,9 millones de consultas. Pero esta cifra podría ser sensiblemente superior si no se perdieran citas por el simple hecho de que los pacientes no acuden a las mismas. Según la Administración sanitaria, en torno al 8 por ciento de los usuarios que son citados no acuden al hospital. Este porcentaje, extrapolado al total de la actividad, significa que son unas 150.000 las consultas que se pierden anualmente por incomparecencia del paciente. ¿Simple dejadez del usuario? El Servicio de Salud del Principado (Sespa) sostiene que no. "Influye mucho el hecho de que los usuarios no dispongan de un cauce para comunicar al hospital que no pueden ir", declaró a este periódico José Ramón Riera, gerente del Sespa.

Como respuesta, la Administración pondrá en marcha, en las próximas semanas, un proyecto piloto en el área sanitaria de Arriondas. Consiste en una aplicación informática que podrá descargarse en el teléfono móvil y que enviará al paciente un mensaje de recuerdo de la consulta, la prueba diagnóstica o la operación que tiene programadas. Esa misma aplicación le permitirá advertir de que no puede acudir, si es que ésa es la situación.

Por el momento, esta opción de respuesta se limitará a las consultas, que es el epígrafe que más preocupa hoy a las autoridades sanitarias. "Si el resultado de ese pilotaje fuera positivo, de inmediato extenderíamos esa aplicación a toda Asturias", señaló Riera. Una vez que el sistema llegue a toda Asturias, el Sespa estima que las pérdidas de consultas se reducirán a la mitad. Es decir, que en cifras redondas pasarán de 150.000 a 75.000. "No aspiramos a que vengan todos, sino a que avisen los que no vayan a venir, pues de este modo el hueco es cubierto por otro paciente", explicó Riera.

La asistencia sanitaria pública maneja cifras mastodónticas. Sólo los hospitales -los centros de salud van por otro lado- atendieron en el año 2016 un total de 548.189 primeras consultas y 1.356.030 consultas sucesivas. En total, la cifra ya citada de 1.904.219 citas con el especialista. Las primeras consultas suelen durar más tiempo, puesto que en ellas compete al facultativo diagnosticar la enfermedad. Las segundas son más breves y sencillas, por lo general.

Ante unas cifras tan voluminosas, y ante el complejo desafío que implican las largas listas de espera para consultas, la Administración considera que ha llegado el momento de "atajar ineficiencias". Y, en esta línea, se impone abordar el absentismo del paciente, un problema común a todos los países y a todos los sistemas sanitarios públicos. Según algunas publicaciones recientes de ámbito internacional, pueden fallar hasta el 12 por ciento de los enfermos citados (estimación realizada en Reino Unido). En Galicia, la Xunta calcula que el absentismo se sitúa en torno al 9,4 por ciento. En Asturias, en el área sanitaria de Langreo, los responsables del Hospital Valle del Nalón han detectado que "todos los días faltan a sus citas entre 40 y 45 personas, lo que además de ser muy insolidario, nos hace perder tiempo y dinero". El factor común de todos los estudios realizados es que la incomparecencia de los enfermos puede llegar a causar pérdidas económicas muy cuantiosas.

Como es natural, se da por hecho que estas incomparecencias de los pacientes obedecen a causas variadas. Pero en manos de la Administración está combatir principalmente dos: los olvidos que puedan producirse y ofrecer la posibilidad de comunicar al hospital que no se acudirá a la cita, ya sea por cualquier causa de fuerza mayor o simplemente porque el enfermo ya no estime necesaria la consulta.

Hasta la fecha, algunas áreas sanitarias de la región han puesto en marcha medidas parciales. Las soluciones también tienen coste, aunque sólo sea la contratación de personal para atender las eventuales llamadas telefónicas de los pacientes.

La aplicación para el teléfono móvil que se probará en el área sanitaria de Arriondas se suma a la que ya existe para solicitar consulta en los centros de salud de la región. "El paciente podrá descargarse su agenda de atención hospitalaria y recibirá recordatorios de sus citas, ya sean de consultas, pruebas o intervenciones quirúrgicas", precisa el gerente del Sespa. El objetivo último de la Administración sanitaria se centra en "actuar en conjunto de la región".

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