Una cámara de fluorescencia, única en España, para observar minerales mediante radiación ultravioleta es una de las piezas estrella de la ampliación del Museo de Geología junto con el meteorito hallado en Cangas de Onís en 1866 y descrito en origen como una estrella de humo blanco que desprendía chispas. La pieza se exhibe ahora en un espacio exento, indicando su historia y la decena de museos que en todo el mundo guardan fragmentos del meteorito asturiano registrado a las diez y media de la mañana del 6 de diciembre de 1866. En lo que se refiere al edificio, incluye, como novedad, una puerta de acceso directo desde la calle que permitirá acercar más el museo a la ciudadanía. El rector, Santiago García Granda, presidió la reinauguración acompañado por el director del departamento de Geología, Sergio Llana y el conservador de este espacio, Luis Miguel Rodríguez Terente, quien destacó la labor del catedrático de Cristalografía Dámaso Moreiras, ya fallecido, para que el proyecto cuajara.

El Museo de Geología, abierto al público por primera vez en 2001, triplica con esta ampliación su superficie real, alcanzando los 300 metros cuadrados, lo que ha permitido dotarlo de las oportunas medidas de accesibilidad y aumentar el número de piezas expuestas hasta superar el millar.

Además, existe un punto donde los visitantes pueden retratarse con el planeta Tierra entre las manos gracias a una aplicación de realidad aumentada. El Museo permanecerá abierto al público de 9.30 a 14 horas y de 16 a 18.30 horas, de lunes a viernes, con entrada gratuita. Con la jornada de ayer se espera llegar a la cifra redonda de 50.000 visitas desde que abriera sus puertas por vez primera el 15 de noviembre de 2001. Sus fondos actuales superan las 30.000 piezas. Para el director del departamento, Sergio Llana, el recién inaugurado museo "es un excelente estímulo" para despertar la curiosidad científica de los más pequeños y divulgar el trabajo que se realiza en la Universidad.

El director-conservador, Luis Miguel Rodríguez Terente, subrayó que un 30% del material que ahora sale a la luz nunca antes se había visto y recordó que se encuentran a la espera de completar la exposición con ocho muebles más, con opción a que cuatro de ellos sean esposorizados por empresas. El rector, Santiago García Granda, destacó que no solo abre las puertas un museo de la Universidad sino que se trata de un espacio abierto a la ciudadanía del que se beneficiarán Oviedo y toda Asturias.

Entre las piezas que se exhiben se puede ver una enorme pieza de fluorita, de La Collá (Siero), oro en un testigo de cuarzo de Pena Negra (Ibias), petróleos de México, Libia, Colombia, Nigeria, Rusia, del Mar del Norte y también de Colunga, restos de flora carbonífera o rocas sedimentarias, metamórficas y plutónicas de diferentes puntos del mundo.

El Rector se refirió también al malestar generado por el expediente a un grupo de profesores de Geología que participaban en comisión de una plaza de ayudante doctor en el área de Estratigrafía, y aclaró que "se trata de un proceso normal" en el que está actuando la Comisión de reclamaciones, cuyos miembros aprueba el Claustro y la Comisión de disciplina, que es designada por el Consejo de Gobierno. Así, Granda detalló que se ha iniciado un expediente informativo "a instancias de la Comisión de disciplina que instruye un funcionario del Servicio Jurídico de la Universidad".