Los jóvenes ganaderos tendrán nuevos beneficios específicos en las ayudas de la nueva Política Agrícola Común (PAC), que la Unión Europea diseña en la actualidad, tras la consulta pública abierta el pasado mes de febrero, para aplicarse a partir del año 2020. La medida será especialmente positiva para el sector agrario asturiano, con una media de edad de 55 años, ya que servirá de acicate al relevo generacional, que se hace de rogar.

Atraer nuevos profesionales al campo para combatir el envejecimiento y el despoblamiento de las aldeas son objetivos comunes al Principado y a otras regiones españolas y europeas, y también está en la base de las políticas propugnadas por la consejera de Desarrollo Rural, María Jesús Álvarez.

Según ha podido saber este diario, y a falta de la comunicación oficial sobre la nueva PAC, que llevará a cabo la Comisión Europea a finales del presente mes de noviembre, las ayudas venideras tendrán un sistema de apoyo a los jóvenes diferenciado, que incluirá la financiación adaptada a la incorporación, los gastos de asesoramiento, incentivos para las jubilaciones de los mayores, movilidad de la tierra y recursos destinados a formación y capacitación. Asturias defiende una PAC a partir de 2020 que cuente, como poco, con los mismos fondos que la actual y que garantice las rentas de los ganaderos asturianos, según ha dejado claro la Consejera.

El Ejecutivo regional también reivindica unas subvenciones con recursos que sirvan para garantizar las rentas de los ganaderos y crear empleo y que a la vez tenga en cuenta a las mujeres como protagonistas del medio rural en el siglo XXI.

Bruselas también parece seguir la estela de Asturias en esas reclamaciones. La Comisión pretende fomentar la promoción de las indicaciones geográficas y productos de calidad, una de las principales líneas de desarrollo en las que se asienta el sector agroalimentario asturiano, así como la del fomento de prácticas agrícolas respetuosas con el medio ambiente, la promoción de hábitos alimentarios saludables y la reducción del desperdicio alimentario.

Por otro lado, aunque se habla con insistencia de una renacionalización de la PAC y de un posible aumento de las aportaciones de los estados, para compensar las pérdidas de fondos por el "Brexit", los pagos directos de la PAC, es decir, las cantidades que reciben los ganaderos en sus cuentas corrientes, seguirían siendo financiados íntegramente por las arcas de la UE.

Sí habrá propuestas de establecimiento de límites por explotación, pagos redistributivos para las primeras hectáreas y fomento de las ayudas a quienes acrediten rentas procedentes mayoritariamente de la agricultura.

En materia de pagos medioambientales, la nueva PAC propone simplificar la actual estructura, dando mucho más protagonismo a los Estados miembros a la hora de establecer sus prioridades en materia medioambiental y a favor del clima, con mayor flexibilidad para su ejecución.

Pueblos "inteligentes"

En desarrollo rural cobrará realce el nuevo concepto de "bioeconomía", ligado a prácticas que favorezcan un entorno sostenible, y el impulso de la conectividad del medio rural a través de los llamados "pueblos inteligentes". También se mantendrán iniciativas tradicionales como los planes "Leader", que han financiado cientos de proyectos en Asturias, gestionados a través de la Red de Desarrollo Rural (Reader). La PAC deja en Asturias casi 80 millones de euros anuales que perciben 10.900 ganaderos y agricultores de la región. Los pagos directos se llevan en este ejercicio más de 63 millones de euros.