Las mujeres maltratadas que deciden denunciar a sus parejas y abandonar el domicilio en el que conviven, deben marchar "con todo": dinero, cartillas bancarias, contratos bancarios e informes médicos sobre el estado de salud de ellas, "que seguro están a tratamiento", son fundamentales para demostrar en el juzgado que efectivamente son víctimas de violencia de género. La recomendación la hicieron ayer las abogadas expertas en la atención a víctimas de malos tratos María Melendi de León y Sonia de la Paz Fernández durante la mesa redonda celebrada ayer en el Club Prensa Asturiana con el título "Las múltiples caras de la violencia de género". Las expertas reclamaron además que el procedimiento policial y judicial por maltrato de género no se paralice si la víctima no denuncia, como ocurre en la actualidad.

El acto lo abrió el escrito ovetense Ovidio Parades, autor de la obra "la mujer de al lado", cuya protagonista es una mujer maltratada. "El primer paso para erradicar esta lacra es la educación, en casa y en los colegios, pero sobre todo en casa", remarcó.

María Melendi de León, abogada del turno de oficio especializada en violencia de género, especificó que sólo se denomina así a aquella que se da entre parejas y exparejas, con independencia de que haya o no convivencia. Y centró su exposición en explicar las fases del maltrato, que comienza con la acumulación de tensión que provoca el hombre, riñendo por todo y culpando a la mujer, continúa con la agresión física y finaliza en la "luna de miel", que es cuando él le pide perdón y asegura que no volverá a pasar. "Esta fase cada vez es más corta y acaba cuando la víctima está totalmente sometida".

Elia Fernández, del Hospital Valle del Nalón, explicó el protocolo sanitario en Urgencias. "Las víctimas vienen atemorizadas, con crisis de ansiedad y casi todas ocultando lo que ha pasado".

Sonia de la Paz Fernández, abogada y presidenta de la Asociación Mujeres en Igualdad, recomendó acudir al hospital cuando hay agresión física y a la policía si el maltrato es continuado. "Cuando se decida a denunciar, la mujer debe marchar de casa con todo lo que pueda demostrar la sumisión a la que está sometida y sus informes médicos, porque llevará mucho tiempo sufriendo y estará a tratamiento", afirmó con el apoyo de María Melendi.