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"Gastar en la rampa de Pajares es invertir en pasado", dicen las empresas ferroviarias

Coca defiende el ancho estándar en ambos túneles de la Variante y que en uno se permita el tercer hilo para el ancho ibérico

"Gastar en la rampa de Pajares es invertir en pasado", dicen las empresas ferroviarias

"Gastar dinero en la rampa de Pajares es invertir en el pasado", señaló ayer Pedro Coca Castaño, presidente de la Asociación de Empresas Ferroviarias Privadas (AEFP). El colectivo lo tiene muy claro: el dinero debe gastarse en la Variante, acondicionándola para el transporte tanto de pasajeros como de mercancías. ¿Cómo? Primero, desplegando vías con ancho internacional o estándar (1.435 milímetros) en los dos túneles. Y segundo, con un tercer hilo para ancho ibérico (1.668 milímetros) en uno de ellos. Es la "única solución" de futuro para Asturias; además de "factible y económicamente razonable". Y "no retrasaría la obra", según la AEFP.

Pedro Coca subrayó que invertir en la rampa de Pajares "no tiene sentido", no solo ya por el gasto que supondría su acondicionamiento, sino en el que acarrearía el mantenimiento. En opinión de los integrantes de la AEFP, "todo el dinero" disponible debe destinarse "a la Variante", pues eso sí será "poner dinero para el futuro".

Para las empresas que integran la AEFP, "desde el punto de vista egoísta, lo más cómodo" sería mantener el ancho ibérico, pues es el que utiliza la mayoría de sus unidades. Incluso acondicionar la rampa de Pajares les beneficiaría. Pero "guste o no guste, en veinte o treinta años toda la red ferroviaria española tendrá que tener ancho internacional", señaló Coca, quien destacó que en la actualidad aún hay unos 14.000 kilómetros con ancho ibérico.

Pedro Coca Castaño destacó la validez de los informes de la Plataforma Tecnológica de Túneles, que calificó de "muy rigurosos" e "interesantes". No obstante, discrepa sobre la solución provisional que propone: habilitar ancho internacional en uno de los túneles y ancho ibérico en el otro. "En España todo lo provisional acaba durando treinta años, y cuando se oye 'ya se cambiará' tiemblan las piernas", indicó Coca, quien lamentó que ningún gobierno y ninguna oposición, hasta ahora, hayan sido capaces de pactar un Plan de Infraestructuras a veinte años, lo que acarrea que haya "uno nuevo cada cuatro años".

La apuesta

La Asociación de Empresas Ferroviarias Privadas apuesta porque haya ancho UIC (internacional o estándar) en los dos tubos, y que se despliegue en uno de ellos un tercer hilo con ancho ibérico. Según Coca esta solución no resultaría cara y sería "definitiva", pues en el futuro únicamente habría que retirar ese tercer hilo.

El único problema que el tercer hilo tiene que ver con el número de desvíos, pues la Agencia de Seguridad Ferroviaria limita en ellos la velocidad. Pero en el caso de la Variante de Pajares apenas habrá desvíos, por lo que la velocidad se resentiría mínimamente. El tercer hilo, que se ha instalado en el Corredor Mediterráneo, sería además "funcional", pues facilitaría la conexión de la red general con los puertos asturianos, añadió Coca.

El presidente de la AEFP destacó que en la rampa de Pajares, entre mercancías y pasajeros, hay en la actualidad unas 140 circulaciones semanales. El paso del tráfico a la Variante y la competitividad de la alta velocidad provocará un aumento de la frecuencia de los viajes, según Coca, que puso como ejemplo lo que ya ha ocurrido en el trayecto Madrid-Valencia.

"La solución de dotar a un túnel con ancho ibérico y al otro con ancho UIC podría funcionar a corto y medio plazo, pero acabaría generando problemas de capacidad", señaló Coca, quien destacó que al colectivo que preside le preocupa "mucho" que se den "soluciones políticas a problemas técnicos". De ahí que reclame un "estudio pormenorizado" sobre la solución definitiva.

Coca rechazó que la circulación de mercancías por la Variante pueda provocar el desgaste acelerado de las vías. "Los vagones se revisan cada 5.000 kilómetros; o sea, casi cada semana. Y las locomotoras cada 10.000. Además, al ser la velocidad menor (en mercancías está limitada a 100 y 110 kilómetros por hora) la inercia es mucho menor, y por lo tanto, también el desgaste de la vía", añadió el presidente de la Asociación de Empresas Ferroviarias Privadas, a preguntas de LA NUEVA ESPAÑA.

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