El juego online entre los menores asturianos es una epidemia invisible. Así lo advierte la asociación de Ludópatas en Rehabilitación (Larpa), que trabaja ahora ayudar a tres menores enganchados a los videojuegos, "la antesala del juego online", según indica Máximo Gutiérrez, presidente de la entidad. Sin embargo, en sus recientes charlas ante unos 400 alumnos de secundaria, descubrieron casos más preocupantes, como el de un chico de 15 años que jugaba con su padre al póker online, o el de otro menor que ayudaba a su abuelo con el "Rasca Millonario" porque el hombre no se arreglaba con el ordenador. "Se empieza con una tontería, como enseñar el póker a un menor, y se acaba en algo peligroso. Es inadmisible", añade Gutiérrez. "No sabemos lo que se nos está viniendo encima con el juego online", advierte.
Ahora son los eSports los que están embizcando a los menores. Hay ya casos de abuelos endeudados por el vicio de su nieto a estos juegos de competición virtuales. Y hay también casos de menores apostadores dada la facilidad de acceso a esos sistemas, que además ofrecen gratuidad para los primeros lances. Las autonomías mostraron su preocupación por este fenómeno en el último Consejo de Políticas del Juego, y la administración central sopesa medidas para poner límites.
En Asturias, va a reunirse en breve el Consejo del Juego, en el que se presentará el esperado plan contra la ludopatía, que incluirá un protocolo de actuación en caso de que se descubra a algún menor jugador. El protocolo se acompañará además de un plan de inspecciones que hará especial hincapié en el acceso de niños y adolescentes a las máquinas tragaperras de los bares, hoy por hoy los únicos lugares en los que los menores pueden convivir con el juego, ya que tienen vedada la entrada a bingos o casinos.
En mucho bares puede verse a niños de muy pocos años jugueteando con los mandos de las tragaperras, atraídos por los colores y las luces. "Hay un desconocimiento por parte de los padres y los educadores de los problemas del juego. Los dejan junto a las máquinas para que estén entretenidos, pero hay que tener cuidado con esas cosas", advierte Máximo Gutiérrez.
Identificación para jugar
La medida definitiva que impediría que los menores pudiesen acceder a las máquinas tragaperras -el 70 por ciento de los ludópatas que piden ayuda para rehabilitarse tienen problemas con este juego- sería establecer limitaciones como el uso del carné electrónico para poder utilizarlas. Esta medida viene siendo demandada desde hace años por Ludópatas en Rehabilitación. "En algunos lugares, esa identificación podría ser incluso a través del rostro", indica Gutiérrez. La medida, como señala la directora de Seguridad del Principado, Pilar Alonso, está comenzando a plantearse, aunque a largo plazo. No obstante, supera el ámbito de las competencias de las comunidades autónomas.
El sector del juego da empleo a unas mil personas, seguró ayer el consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, durante la presentación de una aplicación informática que ahorrará a los empresarios el tener que realizar alrededor de 9.000 trámites presenciales con la administración del Principado, con un ahorro de unos 60.000 euros. "El sector del juego es muy importante en esta región y además está comprometido con la lucha contra la ludopatía y en el Consejo del Juego", resaltó el Consejero-
En Asturias hay actualmente 6.000 máquinas de juegos de azar, conocidas popularmente como tragaperras, así como unos ochenta operadores de juego. La cifra de máquinas tragaperras es la misma que en los años ochenta. El sector del juego se está comenzando a recuperar, tras pasar unos años de capa caída.
